Europa se esfuerza para que el Euro Digital no acabe con el efectivo

La Unión Europea se encuentra inmersa en el proceso de conformación del llamado Euro Digital, la apuesta del continente por incorporarse a las monedas y los pagos digitales, algo que demandan los consumidores europeos. Desde la Comisión Europea se asume que el impacto de este Euro Digital puede ser tan alto como para que se necesita, desde este momento, el reforzamiento del dinero en efectivo. Mientras en Bruselas y el resto de capitales europeas se desarrolla esta batalla tecnológica, el Sector en España sigue obligado a trabajar con dinero en metálico, con el riesgo de seguridad que ello representa.

El euro digital, así, es una forma digital de dinero emitido por el banco central y ofrecería una mayor variedad de opciones a consumidores y empresas en situaciones en las que no se pueda utilizar dinero en efectivo físico. En el contexto de la transición digital de la UE, el euro digital podría respaldar las estrategias de finanzas y pagos digitales de la UE, gracias a su potencial como medio de pago adicional, innovador y seguro. Desde la Comisión Europea, según las autoridades, también podría “facilitar el desarrollo de soluciones de pago minorista paneuropeas e interoperables“, así como “fomentar la eficiencia, la innovación y la resiliencia en la economía digital de la UE”.

Por otra parte, y de forma paralela la Comisión Europea ha presentado una propuesta destinada a garantizar la disponibilidad continua de dinero en efectivo en euros. Estas medidas buscan satisfacer las necesidades tanto de aquellos que prefieren el efectivo como de aquellos que optan por las transacciones digitales. Según la Comisión, el euro se mantiene como un símbolo de la unión y la solidez de Europa. Y la conclusión es clara: “Si bien muchas personas aún desean la opción de utilizar dinero en efectivo, cada vez más personas optan por métodos de pago digital debido a factores como la pandemia de COVID-19”.