El Sector acepta sus DEBERES y reivindica sus DERECHOS

Araceli García, Presidenta de ANDESA y moderadora de la segunda mesa de debate expuso que: “Nuestro Sector es imprescindible para la economía de nuestra sociedad. Como ha dicho Manuel Vázquez, “el juego no es el problema, hay personas que tienen problemas con el juego”, y nuestras empresas son cumplidoras, de modo que la Administración tiene que evitar tomar medidas que impidan el normal funcionamiento de las empresas”. Con este mensaje al auditorio Araceli García dio comienzo el segundo debate en torno a “La contribución del juego a la sociedad. Programa de juego responsable”, en la que intervino en primer lugar José Antonio Gómez Yáñez, Profesor de Sociología de la Universidad Carlos III.

Situó con rotundidad el Profesor Gómez Yáñez al Sector del Juego como un sector económico en la sociedad a partir del dato de que en Andalucía se juegan en el Sector Privado 1.322 millones de euros, pero hay que tener muy en cuenta la relación entre cantidades jugadas y premios para manejar cantidades reales.

Distinguió entre los Juegos Públicos de SELAE y ONECe y los del Sector Privado por ser los primeros “juegos de ilusión” y los segundos de diversión y entretenimiento. El juego de entretenimiento genera visitas, casi 30 millones de visitas a los locales de Andalucía en el último año, mientras que SELAE y la ONCE lo que generan son compras. Aunque señaló a la ONCE como un Operador muy singular que no sólo tiene sus locales y quioscos, sino una red complementaria como las Oficinas de Correos que en Andalucía tienen casi 17 millones de visitas al año.

También hay una gran diferencia fiscal ya que la ONCE está exenta de impuestas, y SELAE casi exenta, mientras que el Sector en Andalucía paga 172 millones de euros. Una cantidad que desbrozó por subsectores situando a la cabeza a las máquinas en Hostelería.

El problema también deriva hacia la imagen del Sector porque se interpreta que los márgenes correspondientes a las empresas son directamente de beneficio “lo que es muy peligroso”, cuando ese dinero se destina en parte muy considerable a capítulos como la financiación, adquisición de equipos, retribución de personal, rehabilitación de locales y por lo tanto esa cifra que en Andalucía es de 279 millones de euros no son beneficios sino ingresos.

Hay que poner en valor que los impuestos al Sector sirven para realizar servicios públicos y para financiar aparatos administrativos. También que el Sector genera mucho empleo, mientras que por ejemplo la Banca está cerrando muchas sucursales, haciendo Eres y ha perdido miles de empleos. Incluso gracias al Sector en la Hostelería se sostienen casi 4.000 puestos de trabajo.

Justo al salir de la crisis el Sector contribuyó a la sociedad también en aspectos que por norma general no se consideran, como su efecto dinamizador del mercado inmobiliario mientras se cerraban las mencionadas sucursales bancarias y tiendas y todo tipo de comercio en las calles, el Sector ha ocupado locales siendo alternativa a los locales vacíos invirtiendo en construcción, alquileres y reformas. Hay 855 locales de juego en Andalucía que están inyectando 25 millones de euros a la calle en estos conceptos.

Finalmente se refirió a lo moderado del gasto medio del jugador en sus visitas a locales de juego, en contraposición por ejemplo a los elevados gastos de homologación de las máquinas.

Alejandro Landaluce, Director General de CEJUEGO, enfocó su intervención al Juego Responsable, “aunque el Juego no es responsable ni irresponsable, lo que hay que ver es qué uso hacen las personas de él”. Desde el dato contrastado de que el juego problemático alcanza el 0,3% de la población, observó que al aplicarse a la población entre los 15 y los 64 años supondría llegar a las 80.000 personas, una cifra que hay que tomar en consideración. Pero también sabemos que las personas diagnósticadas en España son alrededor de 7.000, una cifra contrastada en tanto que la anterior es estima, y que en todo caso sitúan a España a la cola de los países problemáticos por esta cuestión en Europa y en el mundo.

Utilizando una serie de gráficos estadísticos que presentamos en un pdf al final de esta crónica, Alejandro Landaluce expresó que “hay que aceptar que hay un 5% de jóvenes que acceden al Juego Privado y que debemos tomar medidas al respecto”. Pero la inmensa mayoría de los españoles, el 99,7%, juega de forma responsable y se divierte y eso es lo que debemos de poner en valor. El Juego no ocupa un puesto relevante en los problemas de Salud Pública, y no se justifica que lo haga en los medios de comunicación o por parte de los políticos, entonces ¿qué es lo que ocurre?. La respuesta es que hay que cerrar filas en el Sector para presentar una imagen común ante la sociedad haciendo una revisión interna. Abogó por cortar excesos en la publicidad, denunciando al mismo tiempo las campañas y horarios del Juego Público a este respecto y demostrar que el Sector es el primer interesado en la tolerancia cero con los menores. Asimismo defendió la planificación, dependiendo de la situación en cada Comunidad Autónoma.

Carlos Duelo, Presidente de COFAR, se refirió a las dos visiones del Juego ante la sociedad, la de la Industria creadora de empleo, que aporta progreso y contribuye con sus impuestos, y la segunda con el foco en sus externalidades y la tendencia a limitarlo e intervenirlo como una cuestión de Salud Pública, algo que ya ha llegado a los medios de comunicación. A este respecto, afirmó, “no están pasando cosas que no hayan ocurrido en otros países cercanos”, como en Alemania, en Italia o en el Reino Unido que cuentan con normativas muy restrictivas. Son tres escenarios sobre los que reflexionar por sus similitudes con nuestra situación, aunque la regulación en España contempla un modelo muy bien controlado que es el de la célebre Pirámide donde cada subsector tiene su espacio y no hay riesgo de que los bares se conviertan en Salones. Preservar eso es muy importante y aunque los Operadores siempre hemos cumplido muy bien las normativas, la sociedad nos exige dar un paso más con los controles o la regulación de la publicidad.

José Sánchez Fayos, Secretario General de COFAR, refrendó posiciones anteriores de sus compañeros de mesa al reconocer que el Sector tiene un problema de comunicación “que yo creo que es insoluble”, dijo al señalar que por contraposición SELAE tiene un presupuesto de publicidad de 66 millones de euros. Con ese control de medios tanto SELAE como la ONCE “quieren nuestro mercado” y lo hacen desde una batalla desigual y de muy difícil solución.

A continuación el ponente se centró en el Programa de Acreditación de Juego Responsable que se va a iniciar por Cataluña para extenderse a todas las Comunidades. El Programa se enmarca en las políticas de Responsabilidad Social, que hay que diferenciar de las áreas de Cumplimiento de las Sociedades o de sus Servicios Jurídicos, lo que resulta especialmente complicado en las empresas de pequeñas dimensiones, como se ha comprobado en otros países y en otros sectores. Gráficamente afirmó que “la sociedad no tolera empresas autistas”, es decir que además de un buen producto les exige su entroncamiento con la propia sociedad.

La cuestión empieza por la Regulación, “y tenemos la mejor Regulación de Europa que sólo con pequeños ajustes puede dar todas las respuestas” con lo cual la Administración responde a su papel, igualmente en el tema de Cumplimiento el nivel es elevado, lo que hace que las empresas también cumplan con el suyo, y el problema surge al plantarse en este nivel y no dar el siguiente paso, el de la Responsabilidad Social, que no es coercitivo sino voluntario y hace que surjan las preguntas de ¿para qué, si yo ya cumplo?.

Para introducir la necesaria mentalidad de cambio hacia la Responsabilidad Social hay que implicar a todos los agentes, a los locales de juego, pero progresivamente también a los bares e incluso a las Asociaciones de exjugadores, explicó Sánchez Fayos.

Con observaciones como que en el mundo de las finanzas los inversores ya buscan a quienes tienen políticas de Responsabilidad Social, o rechazan a quien no las tiene, Sánchez Fayos pasó a describir el desarrollo práctico que está siguiendo el Programa de COFAR y su problemática con los Operadores, la Hostelería y los propios jugadores. La parte nuclear del Programa se dirige en materia de formación a los empleados de establecimientos de juego y personal de hostelería y su seguimiento es transversal por parte de todos los interesados. Las propuestas del Programa son muy flexibles ya que recogen sensibilidades diferentes y lo que puede ser obvio para un Operador en materia de Regulación o de prevención quizá no lo es para el responsable de un bar o para el propio usuario. En consecuencia el seguimiento del Programa es también multidisciplinar y su resultado será que dentro de no mucho tiempo podrán verse en la entrada de los establecimientos unas pegatinas que acreditan que su personal ha realizado los correspondientes Cursos de Formación.