SE ACABARON LAS “MILONGAS”

La frase del titular no es mía, pertenece a Jesús Franco y la pronunció durante el Acto de presentación en Madrid de su espectacular Bingo Electrónico. Con esa forma tan peculiar y absolutamente personal con la que el Presidente de Recreativos Franco se expresa y consigue que sólo se le entienda lo que él quiere que se le entienda, remachó la frase de las “milongas” con otras no menos claras: “ Ni debajo de la alfombra”… “

La frase del titular no es mía, pertenece a Jesús Franco y la pronunció durante el Acto de presentación en Madrid de su espectacular Bingo Electrónico. Con esa forma tan peculiar y absolutamente personal con la que el Presidente de Recreativos Franco se expresa y consigue que sólo se le entienda lo que él quiere que se le entienda, remachó la frase de las “milongas” con otras no menos claras: “ Ni debajo de la alfombra”… “ Ni detrás de la cortina “… “ Aquí no se va a homologar nada que no esté contemplado en los Reglamentos. Y si se intenta, que sea para todos igual y al mismo tiempo”.

Tirando de carisma, pues sólo Manolo Lao le iguala pero nadie le supera, Jesús Franco lleva varios meses en una especie de cruzada personal en contra de las injusticias a las que los verdaderos Empresarios del Sector se han visto enfrentados en los últimos años por una mezcla diabólica de nuevas tecnologías y Autonomías relajadas a la hora de aplicar correctamente la deseada ecuanimidad reglamentaria. Sencilla y claramente, Jesús Franco no quiere más sorpresas. El hombre que lleva más de cincuenta años dedicado al Recreativo no está dispuesto a consentir más “milongas” en el Sector. Quizá por eso, ha dejado oír su queja y su demanda de una Patronal fuerte y unida que lleve a los empresarios del Juego en la dirección correcta…

Tiene razón, pero su voz parece clamar en el desierto creado por la insolidaridad y el egoísmo de algunas empresas que no están por la labor. Empresas que o bien no entienden los tiempos que se avecinan o sencillamente porque al entenderlos no desean pasar por el bochorno y la frustración de pasadas experiencias asociativas.

A nadie se le oculta que estamos ante un “ nudo” de difícil resolución. Un “atasco” que comenzó hace ahora treinta años y que se ha ido complicando y enredando con el paso del tiempo… Pero eso no significa que debamos ignorar el problema y no tratemos de poner orden en un montón de disparates a los que nos hemos visto abocados con mayor o menor fortuna. Ahora vivimos uno de esos momentos especiales en los que podemos hacer tabla rasa con la dinámica anterior. Estamos en el inicio de un nuevo Sector, de una colosal transformación de nuestra actividad y de una liberalización general que hay que saber administrar mezclando sabiamente el interés general de la Sociedad y el no menos legítimo interés particular sectorial.

Un nuevo escenario en el que, como en la frase bíblica , “ muchos serán los llamados y pocos los elegidos “ … O sangramos nuestro egoísmo y fomentamos el sentimiento de pertenencia gremial o, por el contrario, nos abandonamos al albur de los acontecimientos que sólo buscan nuestro exterminio. Y que conste que no estoy exagerando. Quienes se prodigan como los futuros Amos y Señores del Juego, sólo nos ven como una chusma arcaica y molesta a la que hay que exterminar…