Justos por Pecadores

No dudamos de las buenas intenciones de un alcalde que quiere restablecer la armonía en su ciudad, pero no podemos callarnos cuando las medidas que adopta son un verdadero disparate. Este verano ha saltado la alarma del “Turismo de borrachera” que asola nuestras bellas costas. No es un problema nuevo, hordas de “hoolligans” han invadido nuestras playas durante años. Pero todo tiene un límite. Es una lástima que no se hayan tomado medidas antes porque ahora el restablecimiento de un turismo respetuoso va a ser mucho más complicado. Una de las razones es precisamente, como ha pasado en Calviá, que las Autoridades impongan prohibiciones absurdas.

No dudamos de las buenas intenciones de un alcalde que quiere restablecer la armonía en su ciudad, pero no podemos callarnos cuando las medidas que adopta son un verdadero disparate. Este verano ha saltado la alarma del “Turismo de borrachera” que asola nuestras bellas costas. No es un problema nuevo, hordas de “hoolligans” han invadido nuestras playas durante años. Pero todo tiene un límite. Es una lástima que no se hayan tomado medidas antes porque ahora el restablecimiento de un turismo respetuoso va a ser mucho más complicado. Una de las razones es precisamente, como ha pasado en Calviá, que las Autoridades impongan prohibiciones absurdas.

Y es que, de la misma manera que no se puede solucionar un problema cerrando los ojos y pensando que no existe no se puede prohibir a los ciudadanos y a los turistas de bien cosas tan cotidianas y placenteras como tomarse una cerveza fresquita en una calurosa noche de verano o disfrutar de darle a un puching ball para demostrarle a tus amigos lo fuerte que eres y echarte unas risas. No es sostenible… llegará un momento en que el Turismo responsable, ese que queremos y que nos da riqueza se vaya a otro sitio donde, además de ver lugares bonitos, conocer a gente entrañable y levantarse cada día con un sol espléndido, también sean respetados sus derechos como ciudadanos/turistas.

Esto es grave pero más grave para nosotros es que se empiece a mezclar también al Juego con ese Turismo irrespetuoso. Ya tenemos bastante con luchar con el enemigo al que, en contra de todo el sentido común, no solo le hemos metido en casa sino que además le hemos dado carta blanca para que la dirija. En definitiva tenemos muchos frentes abiertos y debemos tener las ideas claras como Industria. Porque solo teniendo las ideas claras podremos hacer acciones que nos lleven a conseguir la categoría social y empresarial que merecemos. 40 años de Historia. 40 años de esfuerzo por salir adelante con un negocio del que se tenía que dar continuamente explicaciones. No podemos tirar por la borda el trabajo de tantos empresarios que han forjado el futuro que ahora disfrutamos en el presente. El Juego es uno de los motores de nuestro país y sin embargo, no hemos sabido trasmitirle a la sociedad lo que somos, lo que hacemos y como lo hacemos. Ahora es el momento. Apostar por un Turismo sostenible es la única forma de garantizar el puesto número uno que hoy día tenemos como principal destino para el mundo. De igual modo apostar por un Juego Sostenible es la única forma de garantizarnos el futuro que antaño cimentaron y soñaron nuestros grandes predecesores.