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De la mano de Sonia Fernández, Directora de Ingeniería y Fabricación

Reportaje del intenso recorrido de la Revista AZAR por la fábrica que R.FRANCO tiene en Arganda del Rey

AZARplus

Nuestros numerosos lectores no deben perderse el intenso recorrido informativo que la Revista AZAR ha realizado en la Fabrica que R.FRANCO tiene en Arganda del Rey. De la mano experta de Sonia Fernández, Directora de Ingeniería y Fabricación, nuestra Publicación Decana y Líder de la prensa sectorial ha trenzado un valioso Reportaje en el que se ofrecen muchas de las claves que han hecho posible el incuestionable éxito histórico de la Empresa de Jesús Franco. Recomendamos, pues, su atenta lectura. 

R. FRANCO: El nacimiento de los modelos que conquistan nuestro mercado 

Cuando en unas horas se atraviesan muchos años de historia, cuando al recorrer un solo edificio se cruza por toda nuestra geografía e incluso por países de Europa y de otros continentes, es que está ocurriendo algo muy especial y es necesario que ojos y oídos estén muy atentos a cuanto nos rodea.

Por fortuna en esta visita a la Fábrica de R. FRANCO en Arganda del Rey hemos podido contar con la espléndida guía de Sonia Fernández y la extraordinaria disposición y amabilidad de sus compañeros. Son quienes nos han ayudado a comprender la vocación y pasión por un trabajo que no se ve, pero que día a día está al otro lado del telón cuando comienza en bares y Salones, en Bingos y Casinos, el magnífico espectáculos de las máquinas recreativas y de juego que han conquistado una y otra vez el liderazgo en nuestro Sector.  Un ambiente de excepcional compañerismo y eficacia y la ilusión por el futuro por encima de todas las crisis y las dificultades son el oxígeno de la Fábrica que desde estas páginas ha querido abrir sus puertas a nuestros lectores   

Al entrar en la Fábrica de R. FRANCO en Arganda del Rey, un edificio en apariencia similar a otros muchos en el cordón industrial de Madrid, inmediatamente se percibe que se trata de un entorno muy especial.

Se debe a que al trasponer sus puertas ya estamos dentro del Sector, dentro de la auténtica alma del Sector del Recreativo, y eso significa que en cada jornada de trabajo, en cada metro cuadrado donde se desarrolla el maravilloso trabajo de crear máquinas de juego para el entretenimiento y el ocio de miles y miles de personas, conectamos con unos profesionales y unos procesos de creación tecnológica cuyo valor debería merecer toda la consideración de la sociedad y de la Administración.

En este reportaje queremos poner el acento, desde dentro, en esa realidad y para hacerlo hemos recibido toda la ayuda de la Dirección de R. FRANCO y de quienes abren y cierran cada día las puertas de la Fábrica. A su frente Sonia Fernández, Directora de Ingeniería y Fabricación de R. FRANCO, nos ofrece un valioso papel como guía y anfitriona y es un placer comenzar el recorrido conociéndola un poco mejor.

La Ingeniería Electrónica, protagonista del Sector

Entré en la Empresa apenas terminar mi carrera, que era la de Ingeniería de Telecomunicaciones en la especialidad de Electrónica. Yo no tenía ni idea de lo que era el Sector, pero mi curriculum tuvo respuesta y recibí la llamada del Grupo ‘para hacer máquinas recreativas’, lo que me desconcertó un poco porque no sabía lo que eran esos aparatos y tampoco qué era la firma RECREATIVOS FRANCO.

Entramos otra chica y yo a la vez, lo que fue sorprendente porque había muy pocas ingenieras en el mercado industrial, como tampoco  en la empresa, e inmediatamente nos sentimos muy bien porque aunque todos eran hombres y nos ganaban en experiencia, en R. FRANCO nunca nos sentimos discriminadas en ningún sentido. Todo lo contrario, la ayuda se nos proporcionaba desde todos los lados.

La Electrónica siempre ha sido muy marcada como un trabajo de hombres, y eran varones los que lo hacían en Alfonso Gómez cuando yo llegué y pasé los primeros años. Y al ser nombrada Responsable de Electrónica en 2006, mis compañeros se convirtieron en mis subordinados y eso ocurrió dentro del mejor ambiente, lo que es muy significativo del nivel de una Compañía de vanguardia en nuestro país. También estuve bastantes años como Responsable del Departamento de Hardware y luego di el gran salto para ocuparme de toda la parte de Ingeniería, lo que incluye la apasionante creación de prototipos y también la parte que no se ve, pero que es muy importante, que es todo el listado de elementos que lleva un máquina y que es preciso tener bajo un perfecto control y detallado absolutamente al milímetro, hasta el punto de que existe un Departamento que garantiza los materiales sin que exista un error en un solo tornillo.

En julio de 2019 comencé a ocuparme de Ingeniería y Fabricación como dos partes agrupadas por motivo de su estrecha vinculación. La Ingeniería tiene que dar a la Fabricación las cosas lo más fáciles posible para que los procesos de producción sean óptimos, con lo cual se unifican criterios y todos estamos en la misma sinergia dando continuidad a la creación de un prototipo con la producción de esas máquinas. La comunicación se hace mucho más fluida al trabajar en el mismo edificio y la decisión de Santiago de unificar ambas cosas fue sin duda un acierto con el beneficio de una visión global del producto. Somos una piña para conseguir los mejores resultados posibles”.

Ahora Sonia está al frente de un formidable trabajo colectivo que empezamos a conocer por su Taller Mecánico.

Taller Mecánico: La raíz de un proceso

El Taller Mecánico es un área independiente dentro de las instalaciones de Arganda que tiene como Responsable a José María Sepúlveda. Allí se fabrican todas las piezas de chapa que llevan las máquinas que el público encontrará en bares, Salas, Bingos y Casinos y que reconocerá inmediatamente por su estilo único unido al logo de R. FRANCO. El Taller realiza un proceso en el que la profesionalidad, como los propios materiales, también entra en cadena: Corte, plegado, perforaciones, inserción, soldadura, se suceden para dar acabado al producto mecanizado. Ahora mismo, en la situación que todos conocemos por la pandemia, el Taller Mecánico puede responder al cien por cien de la producción gracias a su nueva adquisición, aunque en otras ocasiones la demanda que se vuelca sobre los productos de R. FRANCO ha hecho necesaria la subcontratación de excedentes. Pero aún en estos momentos ocho personas trabajan en un Departamento que mantiene su gran capacidad de producción.

En la dinámica del Taller pronto llama la atención la Máquina de Corte Láser, incorporada a finales de 2019 y que proporciona una gran autosuficiencia a la fábrica que puede realizar esta operación específica que muchas veces requiere una considerable delicadeza. Dotada con carga y descarga automática supone un notable ahorro en costes de producción y puede estar trabajando las 24 horas del día. El láser supera el tradicional corte de cizalla también en tiempo y agiliza toda la cadena dotándola de una velocidad que le ha hecho decir al Presidente Jesús Franco que “es su Ferrari” y que prefiere invertir el dinero en este instrumento que en un coche nuevo.

La división en el Taller Mecánico facilita y racionaliza el trabajo, permitiendo por ejemplo la manipulación individualizada de las piezas que salen del corte por láser y el uso de tres plegadoras hasta llegar a la fase final de soldadura. Sonia Fernández explica que “tanto el Taller Mecánico, como la Carpintería y el Laboratorio Digital lo tratamos dentro de nuestra organización como talleres auxiliares; eso quiere decir que funcionan como lo harían los proveedores externos, de manera que trabajamos bajo pedido”. De ese modo se les realizan a estas áreas pedidos de material que entregan en el Almacén de Fábrica y de ahí se va cogiendo lo necesario para montar las máquinas. Es un proceso lógico como suministro de “materia prima”, ya que tienen que ir por delante de la propia fabricación que abastece los pedidos de los clientes o incluso crea un pequeño stock de máquinas.

Un proceso exacto, minucioso y completo

Pero no hay que perder de vista la globalización de todo el proceso: “Una de las cosas de las que estamos muy orgullosos en R. FRANCO –explica Sonia– es que nosotros controlamos toda la trayectoria de la creación de una máquina. Eso incluye la creación de cada nuevo prototipo, del diseño, de las series de distintos muebles, de los aspectos mecánicos y los electrónicos que se hacen en la parte de Ingeniería desde donde se proporcionan los planos al Taller Mecánico y a Carpintería”.

El proceso de control de máquinas empieza desde cero, desde que nace hasta que el modelo sale por la puerta en las expediciones de distribución. Naturalmente se produce la intervención de Departamentos como los de Expedición y el de Compras, separados de la acción directa de fabricación, pero que gestionan todo el material tanto si llega de proveedores internos como externos. Es el caso de los medios de pago, monederos, billeteros, hoppers que no son diseñados normalmente por R. FRANCO sino por los mejores especialistas que surten habitualmente a la Compañía y que son marcas cuentan con su confianza y el mayor prestigio en el mercado.

En el Laboratorio Digital se imprimen todos los frontales de las máquinas en metacrilato, igualmente todas las etiquetas de botones y las cintas de los rodillos de las que también se realiza el corte. Un elemento estrella de este espacio es el Ploter Digital, del que la Directora de Ingeniería no duda en decir que “nos puede imprimir prácticamente cualquier cosa”.

Se realizan en el Laboratorio grabados sobre el metacrilato que quedan en el relieve. O en otras palabras, estamos ante la vista de la máquina con todos sus alegres colores tal como la ve el cliente final en un bar o un Salón. Eso permite que el visitante de la zona se encuentre ante una batería de frontales verdaderamente impresionante, lo que le permite recorrer en unos metros la mayor parte de la oferta que R. FRANCO explota en nuestras calles: todo un catálogo a escala real de magníficos modelos como Las Reinas de África, Baby Fruit, El Habanero, Neópolis. Jugada Maestra, Burlesque, Arcade… y ¡cómo no! Gnomos Mix, un modelo al que la gente en la calle no permite jubilarse y sigue teniendo como favorito en muchos puntos.

Junto a las puertas de salida

En el Almacén de Expediciones comienzan las máquinas su viaje al exterior para llegar a los clientes de R. FRANCO en toda nuestra geografía o en otros puntos del globo. Están listas para esa prueba de campo que mostrará su capacidad de rendimiento y su atractivo para los clientes. Otros modelos tendrán que tener más paciencia, ya que en principio se destinan al stock, aunque lógicamente con la reducción de producción a causa de la pandemia, este stockaje no es actualmente elevado dentro de una estrategia de producción que R. FRANCO ha adoptado racionalizando todos sus efectos.

El viaje de unos modelos y otros es conocido por su inmediatez en todo el mercado: Los pedidos a R. FRANCO tardan entre siete y diez días en ser servidos, un plazo bastante corto que solamente es posible cumplir gracias al stock y que la Compañía se esfuerza en no dilatar mucho más pese a las dificultades impuestas por la crisis económica y social. De este modo la previsión y el acopio son también factores de servicio al cliente que se tienen muy en cuenta.

La ecología y el cuidado medio ambiental está presente en todas las operaciones fabriles de R. FRANCO y se manifiesta desde el principio por la presencia de enormes contenedores de todo tipo de materiales, madera, plástico o metal, que se utilizan para comenzar el reciclado de cuanto se utiliza en la fabricación y que representa más del 90% del volumen total de material.

Las máquinas VR o recuperadas son de hecho una parte importante del ciclo mercantil y tienen un precio más bajo y normalmente el poco uso que han tenido, aproximadamente un año, permite su reacondicionamiento en muy buenas condiciones.

Proyección internacional

R. FRANCO asume la realidad a todos sus niveles y en el plano internacional como es lógico la Fabricación se ha visto afectada por el coronavirus, hasta el punto de que la situación aún se vuelve más complicada que en España y los problemas surgen constantemente: “El cierre de fronteras de Portugal nos ha supuesto dejar muchas máquinas sin enviar cuando ya estaban listas –explica Sonia–  Algo parecido nos ha sucedido con máquinas o con proyectos que estaban en marcha en México, Colombia, Brasil o Noruega. Nos hemos quedado sin poder inaugurar nuestro Casino en Irlanda después de haber mandado todas las máquinas y haber montado el Salón”. Pero de forma admirable la resiliencia en R. FRANCO hace frente a todos estos avatares a escala internacional y la ilusión está presente y es palpable en el día a día en la Fábrica y en todas sus dependencias: “Remontaremos –dice con firmeza Sonia– y tal vez en el último semestre de este año o ya en el siguiente recuperaremos la fuerza de los tiempos anteriores”.

R. FRANCO tiene producto preparado y tiene novedades para sacar a la calle tan impresionantes como la nueva “Santa Fe” que se anunció en la Feria de Londres anterior a la pandemia. “Y decir Santa Fe es decir mucho, y si no ha sido posible sacarla en 2020 según lo inicialmente previsto, tenemos toda la confianza en que volverá a estar en el mercado con un formidable éxito”.

El aroma de la madera

Pero si volvemos tras este salto por el mapamundi de R. FRANCO a las instalaciones de Arganda al recorrer las instalaciones de la Fábrica es posible encontrase con auténticos ejemplos de experiencia sectorial como el de Ricardo Peinado, orgulloso de sus casi 39 años de trabajo en R. FRANCO, que es testigo de los grandes cambios tecnológicos aplicados a las máquinas: “el propio juego ha cambiado mucho y sería difícil hacer comparaciones actuales con mi experiencia cuando entre en la empresa en la sede de la calle Rufino González, después hice la mili y volví a la calle Alfonso Gómez. Y en el año 2002 ya se trasladó la División Industrial a esta sede”.

En Carpintería de los lotes de materia prima, de pilas de madera cortadas y ensambladas, de aglomerado, se levanta el olor típico de la madera transformada por la mano del hombre, cortada y apanelada en R. FRANCO para convertirse en ocio y entretenimiento al unirse a la tecnología electrónica y formar los modelos más diversos de nuestro Sector. Fernando García es el responsable de esta Sección que fue precisamente la pionera en estas instalaciones y abrió por tanto las puertas a toda la cadena de producción en Arganda. “Llevo trabajando aquí desde el año 80, más de media vida en la que recibido muchas veces la visita de Jesús Franco, y algunas veces la de Joaquín, acumulando recuerdos muy gratos que hacen que mi cercana jubilación me dé un poco de pena”.

Fernando al igual que sus compañeros de Carpintería, hacen un trabajo manual admirable, en un tiempo casi inverosímil montan hileras de muebles que entran en la cadena de montaje de forma incesante.

Cifras de récord

Óscar Ramos Gallego es el Responsable de Planificación y organiza todas las semanas el montaje de máquinas y kits. Es una cadena de modelos B y C, más sus kits, que “ha llegado a ser de 400 e incluso de 500 máquinas semanales”. Récords que aunque la pandemia ha dejado por ahora atrás “no renunciamos a alcanzar y a superar en el futuro. De momento ya estamos notando la subida con la apertura que se produce en algunas Comunidades Autónomas y que creo que ya en septiembre arrojará cifras significativas”. La plantilla completa de este Departamento oscilaría en tiempo de normalidad entre 80 y 100 personas, lógicamente recortadas por el momento.

La visita brindada a AZAR llega hasta la zona denominada Montaje de Previos donde se acoge la colocación de rodillos por separado, de las placas que van en la puerta de las máquinas, de las botoneras, altavoces, etc. Es un trabajo meticuloso con un movimiento armonioso que marcan las cintas transportadoras de las que cuelgan las puertas que finalmente derivan en la cadena de ensamblado. Todos los montajes previos se unen a continuación con el cableado general del modelo y la pieza se une a su peana. Así se realiza el nacimiento de un conjunto impecable que al final de la línea pasa a la cadena de verificación.

Es en este paso cuando las máquinas se encienden y unas comienzan a diferenciarse de otras al introducirse  los distintos programas que se corresponden a las normativas de las Comunidades Autónomas a las que se destinan. Su software cumplirá todos los requisitos de las homologaciones y  han sido verificados rigurosamente para pasar sin errores la lectura de su código de barras. El número de serie de la máquina y la orden de fabricación asegurará que la máquina está en un pedido. Todos los datos del código de tecnología, que en ese momento ya suman la lectura de tres códigos de barras, se comunican por WIFI   con el servidor central de su ERP que verifica la “personalidad” de la máquina que queda lista para su embalaje, retractilado y su salida en expedición o su entrada en stock.

Líneas de Montaje

Tres líneas de montaje de máquinas de Hostelería, y otra de Máquinas C de Casino y de Bingo muestran al visitante de la Fábrica la diferencia visual entre unos y otros muebles y el uso de distintos materiales. Es fácil entender porqué se habla de que las máquinas de Casino son “trajes a medida” dada la peculiaridad de sus realizaciones, siempre en series cortas y en este caso sin stocks y con trabajos que se realizan sobre pedidos concretos.

El Almacén conecta con los muelles de carga hasta los que suben los camiones de los proveedores externos y del propio Taller Mecánico de R. FRANCO para descargar los materiales. Las órdenes de fabricación pondrán en movimiento todo ese producto hacia las líneas de montaje y la tecnología, el ingenio y la vocación de Jesús Franco y de todo un gran equipo profesional realizarán el “milagro” de convertir elementos tan dispares en máquinas de las que disfrutar en la calle. “Cada paso es fundamental –dice Sonia– aunque al ver un aparato acabado, brillando con sus juegos de luces y colores, emitiendo música y sonidos cuidadosamente creados, ¿quién pensaría, por ejemplo, que hay un Departamento de Compras que ha movido todo ese material a través de laboratorios, carpinterías y talleres para hacerlo posible?”.

Uno de los principales objetivos del diseño de la Fábrica es el de favorecer la eficacia de las Líneas de Montaje. Así se ha conseguido una versatilidad que puede aplicarse a la  necesidad de cada momento, se puede hacer una máquina al día o se pueden hacer 20 o incluso 80 que sería la cantidad idonea de fabricación, y en condiciones óptimas la metodología es escalable y todos en R. FRANCO tienen la satisfacción de haber triunfado ante retos como el de producir varios centenares de unidades a la semana. Cien máquinas a la semana, por asombroso que parezca, sería calificado coloquialmente como una producción baja entre los operarios de la empresa.

Hay varias líneas de montaje y de verificación con capacidad de hasta 35 máquinas por línea  que confluyen a su final a través de sus carriles completando una red que suma tres líneas de montaje y dos de verificación si así se requiere. Y además entra en funcionamiento una línea diferenciada de máquinas especiales.

Ingeniería, las “neuronas” del complejo 

La zona de Ingeniería, anteriormente ubicada en la sede de la Plaza de Cronos de Madrid y hoy situada junto a Fabricación, se divide en núcleos de trabajo especializados: Hardware, Mecánica, elaboración de listas de materiales o Estructura y Laboratorio de Metrología. El Laboratorio se encarga de sellar Contadores, poner códigos de homologación y verificar finalmente que todo es correcto, rack, CPU o cualquier otro detalle técnico y utiliza simuladores de juego con todas las variantes posibles para asegurar la adecuación de la máquina. Una función clave que responde de que los modelos de R. FRANCO no tengan fallos en las explotaciones y que está encomendada a profesionales de gran experiencia en la empresa que saben que su trabajo es crítico, aunque todo se garantiza hasta tal punto que antes de salir a la calle cada unidad pasará aún por otros dos filtros más de verificación final. Nada pasa sin detectarse y por eso los resultados de la Compañía son ejemplares.

El Departamento de Metrología de R. FRANCO tiene la categoría oficial de Laboratorio Certificado, o en otras palabras está autorizado para expedir certificados de metrología. Para garantizar esta alta cualificación el Centro Metrológico Español realiza inspecciones anuales con pautas de la máxima exigencia.

Entre otras cosas esta categorización implica que el producto de R. FRANCO que sale sellado de Fábrica no lo puede tocar nadie salvo un instalador autorizado. 

Será publicado en la Revista AZAR número 434 Abril 2021  

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