JESÚS FUENTES: “El Juego es Ocio y Diversión para que la gente lo disfrute sanamente. Y en España el Juego no es un problema”

Hoy, 22 de mayo de 2019 nunca será para muchos profesionales de nuestro Sector una fecha sin significado, ni desde el punto de vista empresarial ni desde los sentimientos personales. Es el día de la jubilación y despedida del Jefe del Servicio de Control de Juegos de Azar de la Dirección General de la Policía en Madrid que con todos los reconocimientos y méritos imaginables ha unido su trayectoria y su trabajo al desarrollo del Juego limpio en nuestro país. Lo ha hecho a pie de obra en sus comienzos y después al frente de ese Servicio Especial del Juego de la Policía que ha ido asumiendo nuevas fórmulas y obligaciones junto al crecimiento de la Industria. Sus palabras, en un repaso directo, breve y coloquial sobre lo que en realidad podría ser todo un libro sobre la Historia del Sector, son el homenaje en forma de entrevista que rendimos al protagonista de este espacio para desearle lo mejor en su futuro.

Para hablar de la Brigada del Juego y de la presencia del inspector Jesús Fuentes en ella hay que echar la vista atrás nada menos que 41 años. 

Sí, pero para saber dónde estamos hay que saber de dónde venimos. Y veníamos de una etapa de prohibición total del Juego hasta el año 77. Al darse un desarrollo administrativo a la actividad se comprendió que era necesario alguien que velara por su cumplimiento normativo y se formó una Brigada ad hoc para este trabajo. Se crearon 5 zonas con 6 Comisarios y 16 inspectores que empezábamos de cero, con un aprendizaje puro y duro en la calle. Pero es que todo el mundo era nuevo en el Juego, incluidos los croupiers.

Vamos, que poco más o menos se andaba sobre arenas movedizas.

Por lo menos se puede decir que éramos muy recelosos y desconfiados, ya que al no tener una formación específica siempre temíamos que nos estuvieran engañando y comprobábamos todo a cada momento.

Entonces el Casino no podía hacer nada sin la presencia del funcionario de control, que firmaba en todos los libros, estaba en todos los recuentos y en todas las incidencias, de modo que desde la apertura hasta el cierre era una jornada sin descanso, a diferencia de los croupiers o personal del Casino que tenían sus turnos.

La Policía asumió un papel nada fácil en una sociedad que hasta el momento anterior considerada al Juego como algo delictivo y clandestino , era, suponemos un ambiente lleno de prejuicios.

Nosotros teníamos la encomienda de velar por la limpieza y la transparencia del juego y en eso no se pueden aplicar prejuicios. Si los había en la sociedad quizá se pueda valorar al pensar que los Casinos tenían que estar ubicados a 25 kilómetros de las ciudades, con la excepción de Santander y San Sebastián, o que en los Bingos que estaban en la calle había gente que se ponía enfrente para ver quién entraba y luego reprochárselo. Yo creo que sí había prejuicios y que lamentablemente todavía no todos se han superado, cuando se puede decir que ojalá todos los sectores funcionaran como el Sector del Juego que es una actividad perfectamente legal, controlada y regulada y con profesionales muy cumplidores y rigurosos con los Reglamentos.

¿Han cambiado mucho los objetivos de aquella Brigada del Juego con los del actual Servicio Especial de la Policía Nacional?

El fin principal sigue siendo velar por la limpieza del Juego. Lo que ha cambiado es la percepción que existía, porque se puede decir que entonces el Sector nos veía como al enemigo, a personas que realizaban unas inspecciones implacables. El continuo contacto y unas relaciones que forzosamente son personales y con una Brigada de puertas abiertas han transformado todo, cuando además se trata de un Sector que supo madurar muy bien.

Policía y Juego, Juego y Policía, despiertan en la imaginación situaciones de peligro, ¿ha sido esa la realidad?

Las situaciones de peligro no han sido lo normal, pero es cierto que se puede estar ante circunstancias imprevisibles frente a personas que se están jugando el dinero. Siempre se trata de imponer la razón más que la fuerza. Pero ese capítulo del peligro se puede dejar en el campo de las anécdotas dentro de nuestro trabajo.

Sin embargo, la Brigada sí ha tenido que actuar con firmeza.

Actuar de acuerdo a la ley por supuesto que sí. Luego si es menester llegarían las sanciones. En esa materia en su día eran competentes los Gobiernos Civiles y tras el paso de competencias correspondió a cada Comunidad Autónoma. Cada uno de estos Gobiernos Autónomos tiene sus reglamentos y su régimen sancionar, pero no existen grandes diferencias y la calificación de hechos leves, graves y muy graves es similar.

¿En la actuación policial se han producido grandes diferencias de control al aparecer el juego online tras años de trabajo donde solo existía el juego presencial? 

Son diferencias enormes. El juego online es mucho más controlable si hablamos del juego legalizado de los portales que requieren una autorización previa de la DGOJ. Están controlados los datos de identidad y los bancarios, y desde ese momento cualquier operación que se realice de retirada de depósitos o de aumento de los mismos, de lo que sea, tiene una accesibilidad total y por lo tanto la detectabilidad de cualquier anomalía es fácil. Si existe algo así nos lo comunican desde la DGOJ para tomar las medidas adecuadas, y te aseguro que desde la DGOJ se actúa con una gran profesionalidad y realizan unas verificaciones de identidad que, por ejemplo, a través del Registro Civil, pueden evitar el uso de identidades de personas fallecidas como alguna vez se ha intentado.

En todo caso la irrupción del juego online tuvo que representar una fuerte puesta al día en los mecanismos policiales.

Hemos sido conscientes del problema que podía venir, igual que con el tema de las Apuestas, y se puso en marcha el Centro Nacional Policial de Integridad en el Deporte y Apuestas como Centro especializado y ventanilla única para recoger cuanto ocurría en el país y hacer un seguimiento con las Unidades de todas las provincias. Y los resultados de esta lucha contra la corrupción son importantes: han sido realizados dos operativos a gran escala con 57 personas detenidas, algunas de ellas futbolistas o exfutbolistas que conocen perfectamente la estructura de los equipos y ahí echan las redes.

Imaginemos que sobre la mesa de tu despacho hay dos carpetas: en una pone Prevención y Formación, en otra Represión. ¿Cuál sería tu favorita?

Sin ninguna duda la de Prevención, Formación y añado Colaboración. Es fundamental y por eso hemos participado en Jornadas de Formación con Federaciones deportivas con charlas sobre todo dirigidas a los chicos de las categorías inferiores del fútbol que son los más vulnerables y las víctimas de estos engaños, que pueden destrozar una carrera deportiva o incluso convertirse en asuntos bastante más graves que entran de lleno en el Código Penal.

Trabajar íntimamente con los Clubs, con los empresarios, con los jóvenes, es el trabajo más eficaz que se puede desear.

La relación Policía-Sector marcó uno de sus hitos con la puesta en marcha de la Operación Salón. 

Es cierto. La Operación Salón surge de esa comunicación y colaboración que siempre hemos pretendido que exista entre el Sector y la Policía. En el año 2008 como consecuencia de un atraco a un Salón resultó muerto uno de sus propietarios; eso fue un revulsivo para nosotros y a través de la Unidad Central de Inteligencia Criminal se diseñó un dispositivo repartido por todo el país y el estudio de todas las características de estos delitos, circunstancias, incidencia en el tiempo, modus operandi… nos dimos cuenta de varias cosas, una de ellas de que varios de estos asaltos o robos eran fingidos.

Eso merece explicarse.  

La explicación está en que en los Salones podía haber más dinero en efectivo que en muchos establecimientos comerciales, incluso más que en un Banco. Y entonces el ladrón podía actuar en connivencia con alguien de dentro del Salón, de un empleado, y dar el golpe en el mejor momento fingiendo atracar a quien le esperaba.

Naturalmente en los casos reales de atraco la Policía no aconseja la resistencia, no queremos héroes. Lo que hay que hacer es llamar a la Policía cuanto antes, incluso ante el simple caso de sospecha por la actitud de alguien porque si llegamos y le identificamos ya se disminuyen enormemente las posibilidades de que el delito se cometa.

Después de repasar el Juego Online y los Salones llegamos a las Jornadas de la Seguridad en los Casinos.

Estas Jornadas también son consecuencia de la colaboración. La Policía siempre ha tenido un trato fluido con los Servicios de Seguridad de los Casinos, que nos comunican las incidencias que pueda haber, los problemas de identificación o cualquier otra circunstancia anómala. En España hay 46 Casinos más las Salas de Castilla La Mancha y es fácil conocernos recíprocamente y llegar a una cohesión y confianza mutua. En menos de 24 horas siempre hay respuesta para solucionar los problemas o disponer de la información necesaria según la índole de cada caso.

En este tipo de Jornadas con el Sector del Juego también hacemos participar a la Policía Judicial, que va a ser el contacto inmediato con los interesados en caso de que se produzca un delito.

¿Y en los Bingos?

La cuestión de la seguridad en los Bingos tiene peculiaridades. Un asalto a un Salón de Juego, que es un local pequeño, se realiza en unos tres minutos, pero un Bingo es bastante más grande y el dinero está en la Mesa de control, normalmente al fondo de la Sala. Por esa y otras circunstancias, como el número de clientes, la estructura de los establecimientos condicionan los delitos, pero no es algo disuasorio para quien se haya propuesto hacerlo. También hay que pensar que para los delincuentes se trata de un objetivo directo, es dinero en metálico y no tienen que transformarlo como cuando roban en una joyería o si se trata de obras de arte o de otros objetos para los que es necesario contar con un perista.

Estamos hablando de las amenazas contra el Juego, pero en la otra cara de la moneda ¿es el Juego en sí un peligro para la sociedad?

He afirmado en alguna ocasión que España es un país seguro para jugar, y sinceramente me ratifico en ello y apoyado por los datos estadísticos. En España el Juego no es un problema, aunque haya quien esté intentando demonizarlo y tome esa posición como un estandarte. Hablamos de ludopatías o de menores, asuntos que son sensibles, pero es que esa sensibilidad se ha tenido siempre. Nosotros siempre hemos sido muy, muy, vigilantes con el tema de los menores y el de los prohibidos y sabemos que son anecdóticos los casos que ha habido después de una infinidad de inspecciones. Además, cuando se ha dado algún caso no ha sido con la connivencia del establecimiento, sino precisamente engañando al establecimiento. Hay falsificaciones y manipulaciones de DNI, eso es cierto, y se dan casos de hacer chantaje al empresario después de conseguir entrar al local pidiéndole dinero por haber podido acceder al juego si no quería que le denunciase. Y se trata de todo lo contrario: es el empresario el que tiene que llamar a la Policía porque lo que se ha cometido es un delito de suplantación de personalidad o de falsedad de documento. No hay que ceder jamás a ese chantaje.

Nos quedamos entonces con tu afirmación de que España es un país seguro para el Juego y sin un problema de Orden Público o de Salud Pública.

Eso es una campaña desatada, no sé con qué finalidad, pero el problema no existe. Todos los estudios serios nos colocan en la cola de Europa en las correspondientes tablas, con una incidencia tan baja como el 0,3%, y además nunca hemos dejado de luchar para combatirlo con el mayor celo. Claro que existen casos muy dramáticos, capaces de ponerte los pelos de punta, pero son casos individuales y no pueden generalizarse. Porque una vez un señor, un ciudadano de origen chino, se subiera en un Casino a una mesa de ruleta pistola en mano y empezara a pegar tiros, por cierto de salva, porque había perdido y aterrorizara a los presentes, no vamos a dejar de comprender que el juego es fundamentalmente ocio y diversión para que la gente disfrute sanamente.

Algo a lo que tu trabajo ha contribuido de modo fundamental durante largos años. Pero ahora te jubilas e incluso ya has pasado públicamente el testigo.

Sí, Javier Molinera toma el relevo y podéis estar tranquilos porque todo queda en muy buenas manos. Es joven y tiene las mismas ganas que tenía yo cuando empecé y estoy seguro de que dará continuidad a nuestra mejor línea de trabajo.

¿No era un inspector de Juego?

No, Javier viene de trabajar en Consumo, Dopaje y Medio Ambiente, actividades que entran perfectamente en el Centro Policial antes mencionado y que le dotan de una experiencia muy útil. Es un profesional excepcional.

Jesús, ¿cómo pasas personalmente esta página, cómo asumes este adiós?

La verdad es que tengo sentimientos contradictorios. Me resisto a esa fecha del 22 de mayo, que es mi fecha de caducidad en la Policía, pero evidentemente es una realidad. Soy de las pocas personas que han estado tanto tiempo en el mismo sitio, desde el año 78 y voy a seguir ayudando en lo que sea posible y además algún proyecto tengo, más que nada en temas de formación y asesoramiento. Me voy satisfecho y no creo que vaya a aburrirme, y pienso pasarlo muy bien dedicando tiempo a mi nieta que ha llegado en un momento muy oportuno.