El Presidente de SOS Hostelería denuncia que la situación que les ha pillado “sin aviso y con los almacenes llenos”, puesto que "la Administración no ha dicho nada hsta el último momento", en relación a las recientes medidas restrictivas del Plan de Navidad, sobre las que ya informamos
Fidel Molina califica la campaña de Navidad de “desastrosa” para la Hostelería valenciana y subraya que 8.000 bares no volverán a abrir
AZARplus
La complicada situación de la Hostelería valenciana sigue agravándose, tras arrastrar una dura crisis desde el inicio de la pandemia, y la campaña de Navidad será “desastrosa”, denuncia el Presidente de SOS Hostelería, Fidel Molina, quien señala que la situación recuerda a lo sucedido en Fallas, cuando también se produjo un anuncio de las medidas restrictivas que no dio tiempo al sector a reaccionar, informa Economia3.com.
Molina explica, en relación a las recientes medidas del Plan de Navidad, -que limitan el toque de queda a las 11 y restringen las reuniones a seis personas-, sobre el que ya informamos, que las pérdidas serán millonarias. En particular, debido a que, por su tardanza, la situación les ha pillado “sin aviso y con los almacenes llenos”, señala, y añade que “el problema que hemos tenido es que la Administración no ha dicho nada hasta el último momento y lo que hemos hecho ha sido lo mismo que en fallas: llenar los almacenes”. Es por ello que, “ahora cuando llega el momento resulta que lo que tenemos en los almacenes lo tendremos que regalar a la gente que lo necesite o no sé qué vamos a hacer con ello”.
Molina apunta que, con las anteriores restricciones, hasta la 1 de la madrugada en Nochevieja, “cabía la posibilidad de hacer dos turnos apurando, pero ahora no hay forma”. Y apunta: “¿Si en nochevieja no se pueden tomar las campanadas en los locales, quién va a ir? Nadie”.
Sobre el límite de seis personas en el ámbito de la restauración, Molina explica que “decir a la gente esté en dos mesas separadas no sirve. Cuando se reúne quiere estar junta”. Por último, como portavoz de SOS Hostelería, Molina concluye que toda medida restrictiva es perjudicial en los momentos donde mayor caja se espera en la región valenciana, como son las Fallas y las Navidades.
Como resultado de ello, las pérdidas son millonarias y “la gente está destrozada y sin ánimo de nada”. Por último, Molina subraya que hasta 8.000 bares y restaurantes de la Comunidad Valenciana han cerrado definitivamente sus puertas.
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