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El Director de Estrategia de la agencia de Seguridad de la Información de Cataluña (CESICAT) abogó en pro de los aspectos positivos de los Videojuegos en la Ponencia “Internet, un mundo de claroscuros” pronunciada en el XIV Congreso de ACENCAS

Tomás Roy: “Hay que empezar a normalizar lo bonito que tiene el jugar por jugar”

AZARplus

“Ante estos retos que pueden generar adicción, el rol de los padres es importante”, señaló en relación a los Videojuegos el Director de Estrategia de la agencia de Seguridad de la Información de Cataluña (CESICAT) Tomás Roy, en la Ponencia “Internet, un mundo de claroscuros” pronunciada en el XIV Congreso de ACENCAS, celebrado en Barcelona.

A su juicio, además de las regulaciones, es importante incidir en lo fundamental que resulta la implicación de los padres: “Es importante que los padres jueguen con los hijos, es decir que sepamos a qué están jugando. Que juguemos a lo que ellos están jugando, que lo probemos, para entender, para poder hablar en la mesa del juego. Se han de celebrar los éxitos, preguntarles cómo han conseguido pasarse a la pantalla”. Roy demanda, en suma, de educar a través del conocimiento y de la complicidad, siempre ejerciendo la labor de control propia de los padres, puesto que “hay empezar a normalizar lo dentro de lo bonito que puede tener el jugar por jugar”.

Tal y como explicó este experto en ciberseguridad, la función de CESICAT está orientada a prevenir y combatir las amenazas de los sistemas información en todos los sistemas de seguridad. Un entorno “lleno de retos”, en el que son claves Internet y Big Data, así como las constantes transformaciones digitales, entre otras, la que supondrá el 5G, lo que supone “acceso inmediato a contenidos diversos”. Con ello, las nuevas formas de entretenimiento cobran una nueva dimensión, trasladándonos a un mundo virtual que, a juicio de Roy, nos aporta tanto aspectos positivos como negativos, con lo que la información y la formación son fundamentales para sacarles todo el partido minimizando o evitando los riesgos.

Con respecto a los Videojuegos, Roy apuntó que pueden resultar “beneficiosos”, a nivel de habilidades, mejora de autoestima o incluso a la hora de la socialización, además de que “muchos son realmente interesantes porque nos trasladan a otros mundos”. Concluyendo al respecto que “entonces podemos decir que hay un mundo en Internet el mundo de los videojuegos positivo”, si bien señaló que “también hay que tener presente todo el conjunto de problemas que hay asociados”.

Enlazando con la deseable normalización del Videojuego, Roy hizo algunas sugerencias que podrían ayudar a los padres a la hora de implicarse con el uso del tiempo de ocio de sus hijos, poniendo el foco en “preguntar y hablar” con los hijos puesto que, de otro modo, “difícilmente podemos acompañar en algunas edades, limitar en otras edades; negociar, explicar o dar autonomía sobre ello”. Entre otras, además de consultar las guías de padres, configurar los dispositivos con control parental, conocer los propios juegos, concretamente “funciona ver los vídeos en Youtube, cómo juegan otros jugadores durante diez minutos, por ejemplo, es tiempo suficiente para ver de qué va el juego, y poder tomar mejores decisiones”.

Considerando también otros aspectos externos comunes a todos los Juegos, habida cuenta de que la tecnología a menudo nos da las cosas dadas y no se pueden cambiar las condiciones con respecto a los datos introducidos, la publicidad, ciberamenazas o, por ejemplo, en relación “las cajas de recompensas de los videojuegos y los micropagos”. Se trata, en suma, de conocer nuestro entorno con el fin de “proteger a los niños de ciertos contenidos no deseados”. Por último, Roy apuntó que “hay que tomar precauciones, saber que existen riesgos de posibles extorsiones, de pérdida de datos y, en definitiva, si los atacantes saben que hay negocio en el mundo de juego, atacarán el mundo del juego“.

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