Serafín Portas: “Hemos venido a levantar la cabeza”

El VI Encuentro AGEO para la Competitividad del Sector se celebró en la Ciudad de la Cultura de Galicia de Santiago de Compostela bajo el impacto omnipresente del Anteproyecto de Ley de Juego de la Comunidad, donde se contienen medidas tan rechazadas por el Sector como la implantación del mando a distancia para las máquinas B en los bares, lo que dio lugar tras la celebración de un Ponencia y tres Mesas Redondas a un acto de Clausura con un claro choque de posturas entre el Presidente de AGEO, Serafín Portas, y el Vicepresidente de la Xunta de Galicia y Consejero de Presidencia, Alfonso Rueda.

Ofrecemos a nuestros lectores el resumen de los contenidos más destacados de las intervenciones realizadas en el Encuentro que comenzó con la Bienvenida a los asistentes del Presidente de la Asociación gallega de Operadores.

Serafín Porta aseguró que el Sector, sereno y vanguardista, puede presumir de ser una Industria modélica en renovación y en libertad y que no tiene que agachar ante nada su cabeza, aunque en Galicia “se viven tiempos difíciles ante una Ley que nació como una demanda del Sector y se ha convertido en un regalo envenenado”, dentro de un escenario con menos juego y más control. En Galicia, afirmó, no existe un problema de Juego y se nos juzga sin conocernos, “pero aquí hemos venido a levantar la cabeza”.

Antonio Fontenla, Presidente de la Confederación de Empresarios de La Coruña, habló en esta Bienvenida de “una respuesta de la sociedad alimentada por un relato desafortunado y quizá interesado ante una alternativa de ocio perfectamente integrada y creadora de empleo”.

Por último Santiago Villanueva, Director General de Emergencias e Interior de la Xunta de Galicia afirmó que el cambio del Juego en los últimos años requiere una modificación de la normativa que data de 1985 en un ambiente en el que la problemática y la alarma hacen  “raro el día sin noticias”, aunque reconociendo que se trata de un Sector “cada vez más respetuoso y comprometido” y recorriendo una serie de cifras y datos que desmienten esa alarma social como por ejemplo que los 78 expedientes sancionadores que se levantaron en el periodo 2015/16 se han reducido a 50 en 2017/18 o que con 6.196 inspecciones realizadas por la Xunta en 2018, y 806 controles sobre menores en 2018 y 802 en lo que va de 2019 se ha comprobado que la problemática no es habitual y cada vez va a menos.