Querida Máquina B de Hostelería
España es un país de tradiciones y una de las más arraigadas es sin duda “echarse una máquinita con las vueltas del café”. Y es curioso porque las B son relativamente jóvenes, pero claro, los bares no y esos si que son la tradición por excelencia de los españoles.
España es un país de tradiciones y una de las más arraigadas es sin duda “echarse una máquinita con las vueltas del café”. Y es curioso porque las B son relativamente jóvenes, pero claro, los bares no y esos si que son la tradición por excelencia de los españoles.
Hoy presentamos en exclusiva la extraordinaria Lucky Brothers de GiGame, que sin duda será una de las sensaciones del próximo Expo Congreso Andaluz, esta noche descubriremos la B que nos tiene preparado Unidesa, con un halo de misterio y que seguro nos sorprenderá gratamente. R.Franco por su parte apuesta por su Jugada Maestra.
Las Máquinas funcionan en la calle y son las protagonistas de cada bar de nuestro país. La tecnología ha ido dándoles más versatilidad y mayores prestaciones pero es la creatividad de sus artífices las que las hace únicas y las lleva al podio de la excelencia.
Cada detalle se estudia con el mayor mimo, cada combinación de colores, cada premio, su música… todo para proporcionar al Jugador la más fabulosa experiencia recreativa de Juego. Y es que el carácter de ocio de estos aparatos es el que les da fuerza y viveza algo que hay que cuidar para no romper su dinámica de éxitos y sobre todo su existencia. Sí, su continuidad porque el cambio de orientación puede provocar prohibiciones o restricciones muy graves como ya ha ocurrido en otros países.
Ahora bien, la Industria se enfrenta a un reto muy importante que no se debe dejar de lado, las nuevas cadenas de hostelería no cuentan con nuestra querida B. Grandes franquicias que se olvidan de la tradición y permanecen ajenos a los beneficios tanto económicos como de ocio que aportan estas Máquinas para sus negocios y para sus clientes. Se abre un debate del que seguro tendremos ocasión de seguir en el Congreso de Torremolinos con las esperadas y valiosas intervenciones de Jesús Franco y Manuel Lao.
El público de los nuevos establecimientos no juega a las tragaperras( máquinas B) ni tiene una buena opinión sobre ellas, por lo que la presencia de las máquinas “ahuyentaría” clientes y además con su recaudación no se pagaría ni la cuota fija (alrededor de 3500-4000 €).
Yo sigo viendo mucha gente jugar en las tragaperras, y aunque es cierto que los nuevos establecimientos ya no las usan en España hay muchísimos bares, y se siguen abriendo bares tradicionales. Ahora bien, es cierto que a un medio plazo podría ser un problema ya que las nuevas generaciones van a por otro tipo de ocio y quizás habría que darles una vuelta de tuerca a las máquinas “B”, buscar la manera de modernizar no solo la forma, que eso ya se hace si no el fondo, y eso pasaría en primer lugar por que fueran más baratas, ya sea el precio de la partida o dando más premios.
Yo creo que falta un contacto de nuestras Asociaciones con las de Hostelería para proponer fórmulas. No basta el contacto OPERADOR-BARERO a escala individual para ver en perspectiva la cuestión. Por ejemplo yo sé de más de un bar que ha retirado las máquinas pese a que eran rentables al encontrarse conque le habían robado una vez o más para ir a por la recaudación de las máquinas más que por las de la caja del bar.