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Se ha frenado una inversión pública de 750.000 euros para acondicionarlo, mientras la UTE adjudicataria, formada por el restaurador Íñigo Ramírez, exsocio del Presidente de la deficitaria empresa pública, invertiría 1,7 millones y pagaría un canon anual de 200.000 euros

Paralizada la adjudicación de la gestión de un restaurante en el Hipódromo de la Zarzuela

AZARplus

Seis meses después de que el Hipódromo de la Zarzuela adjudicase la gestión de un restaurante en sus instalaciones del Monte de El Pardo de Madrid a una unión temporal de empresas (UTE) participada por un ex socio de su Presidente, Álvaro Gutiérrez de la Fuente, el contrato no se ha formalizado. Actualmente, se espera la elaboración de un nuevo plan estratégico para la deficitaria entidad pública, perteneciente a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI).

Así lo informa Eldiario.es, además de señalar que se ha frenado una inversión pública de 750.000 euros que la deficitaria empresa pública se obligaba a invertir para acondicionar el restaurante, mientras la UTE adjudicataria, formada por el restaurador Íñigo Ramírez, exsocio de Gutiérrez, invertiría 1,7 millones y pagaría un canon anual de 200.000 euros.

El mismo medio apunta a dos posibles razones que explicarían esta paralización. Por un lado, “en el sector apuntan el revuelo originado por el conflicto de interés del máximo responsable del hipódromo en esa adjudicación”. Por otro lado, señalan que “otras fuentes” indican que la situación aconseja espera a que el nuevo plan estratégico esté claro: Tal y como reza el diario, “con SEPI sin presidente desde octubre tras la dimisión de Vicente Fernández por su imputación en el caso Aznalcóllar, todavía no hay tomada una decisión formal, porque Hipódromo de la Zarzuela está a la espera de un nuevo plan estratégico que debería estar aprobado antes del verano y la relevante inversión que se obligaba a ejecutar según los pliegos del contrato aconseja esperar a que esa estrategia esté clara”.

Por último, siempre según dicho medio, el Presidente del Hipódromo de la Zarzuela, -partidario de liberalizar las apuestas hípicas para lograr la autofinanciación y viabilidad económica, tal y como informamos-, minimizó en septiembre pasado la importancia de sus negocios previos con ese restaurador, además de señalar que era “la única empresa que cumplía los requisitos; yo me abstuve y no intervengo”, dijo entonces, a firmando que no podía evitar que optaran al concurso.

VER EL DIARIO.ES

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