Pandemia Covid 19 – El Coronavirus y sus efectos sobre la Industria del Juego Privado Presencial en España

Los analisis sobre el impacto de la pandemia del Covid19 están sujetos a la evolución de sus efectos sobre la población y la reacción de las autoridades competentes estableciendo medidas encaminadas a reducir las consecuencias sobre la salud y las vidas humanas que es prioritario en circunstancias como la que nos ocupan.

Sin perjuicio de que es fundamental y prioritario adoptar y afrontar medidas para preservar la salud de las personas, hay unas consecuencias que también afectan de manera grave la vida de esas personas, el impacto que están teniendo sobre la actividad económica en general que conlleva una descomunal pérdida de empleos y empobrecimiento de las personas y con ello un profundo descenso del consumo; la entrada en una recesión cuyos efectos no son exclusivamente temporales si no que tienen unas consecuencias a medio y largo plazo.

Otro aspecto importante es el ámbito global del impacto de la pandemia que tiene también sus efectos sobre la situación de cada país debido a la dependencia industrial, económica y social que ello conlleva.

Escenario de las medidas contra el Covid19 en España

Para España supone, como en muchos otros países, el confinamiento de la ciudadanía supone una reclusión de la economía a un ámbito local hasta que se comiencen a abrir fronteras que permitan recuperar esa unidad de mercado en la que hemos estado inmersos y que afecta a la recuperación de la normalidad de las actividades económicas establecidas en base a un modelo económico construido ad hoc.

El último informe del Banco de España se pone de manifiesto la profundidad y complejidad de la recesión a la que se enfrenta la economía española.

La rapidez y el vigor de la posterior recuperación dependerán de las medidas de política económica”, sostiene el supervisor en su último informe trimestral.

Se afirma que nos enfrentamos a un impacto transitorio pero muy pronunciado, Así resume el Banco de España el impacto que la pandemia del coronavirus tendrá en la economía española. Y su receta para combatirla es clara: política fiscal “ambiciosa, ágil, y coordinada”, según consta en el informe trimestral hecho público.

El organismo recuerda que la pandemia del coronavirus se ha traducido en una “perturbación de inusitada virulencia”, tanto en términos sociales como de actividad económica. En el caso de España, sus expertos sostienen que la declaración del estado de alarma ha cambiado “bruscamente” la trayectoria de la economía del país, que hasta entonces parecía sufrir efectos “limitados” por la evolución de la enfermedad en otros territorios.

En términos de demanda, el Banco de España asume que el impacto en el gasto de los hogares ha sido “muy pronunciado”, a lo que se suma la “práctica desaparición” del gasto de los turistas extranjeros. En cuanto a la oferta, el cierre de algunas industrias ha sido inevitable ante la “brusca” caída de la demanda y los problemas en las cadenas de suministro.

La rapidez y el vigor de la posterior recuperación dependerán de las medidas de política económica”

El supervisor considera que esta fotografía acabará teniendo graves consecuencias en el mercado laboral. A falta de datos actualizados, sostiene que el coste en términos de empleo “con mucha probabilidad, está siendo muy significativo”. Los economistas de la institución esperan que “la mayor parte de esta pérdida de puestos de trabajo se recuperará a medio plazo si, como cabe esperar, la naturaleza de la perturbación es transitoria”.

Esta última palabra se repite hasta cinco vece en el documento: “la perturbación será muy intensa, pero transitoria”, insiste la institución, pero recalca que “la rapidez y el vigor de la posterior recuperación dependerán de las medidas de política económica”.

El supervisor bancario cifra en el 8, % del PIB el volumen de fondos públicos movilizados. De este total, un 0,5% del PIB supone un aumento directo del gasto, mientras que el resto está destinado a la concesión de avales y líneas de crédito a empresas. Crecimiento de la economía era del 0,4% antes de la crisis.

La bajada del PIB para 2020, se estima entre el 6,2 y el 13,6% dependiendo de cuando se levante el confinamiento.

La pandemia rompe la “tónica favorable” de la economía que se había registrado en enero y febrero. De hecho, su previsión era que el primer trimestre de 2020 se completara con un avance del 0,4%, puesto que los datos de afiliación a la Seguridad Social mostraron una “notable mejoría” y el comportamiento del empleo fue “algo mejor de lo esperado”.

Por ello, y para intentar recuperar este ritmo de crecimiento más pronto que tarde, el supervisor sostiene que la “primera línea de defensa” para evitar la persistencia de los efectos económicos de la epidemia debe ser la política fiscal. Sobre las medidas adoptadas por el Gobierno, señala que su objetivo no es otro que “facilitar el acceso a la financiación de los agentes privados solventes que atraviesan problemas de liquidez, evitando que estos acaben transitando hacia un estado de insolvencia”.

“Del éxito de esta batería de medidas, sobre las que no se cuenta con experiencia histórica comparable al caso actual, dependerá en buena medida la profundidad del retroceso económico a corto y medio plazo y su persistencia en los próximos meses”, concluye el Banco de España.

El escenario más probable

El escenario que el Banco de España cree más probable que el confinamiento actual dure ocho semanas (es decir, que termine el 9 de mayo), lo que reduciría ligeramente el impacto en el PIB. En ese caso, la contracción económica estaría entre el 6,8% y el 9,5% este año, dependiendo del momento en el que se normaliza la actividad (justo después de que acabe el estado de alarma o a la vuelta del verano) y de cuántas empresas logren sobrevivir y mantener el empleo.

Dentro de este escenario más probable, la tasa de paro se elevará en 2020 entre cinco y siete puntos, al situarse en una horquilla de entre el 18,3% y el 20,6%, dependiendo de las variables mencionadas. En el caso del déficit público, los niveles más posibles son entre el 7,2% y el 8,9%, mientras que en la deuda pública maneja una horquilla de entre el 109,9% y el 115,3% del PIB.

El Fondo Monetario Internacional llega a hacer una estimación del impacto que puede llegar a un 15% del PIB en la zona Euro, según países.

Caída de la inversión

En cualquier caso, lo que da por hecho el Banco de España es que la pérdida de rentas por parte de las empresas y de las familias va a reducir su capacidad de consumo e inversión a medio plazo, ya que, a pesar del alivio a corto plazo de las moratorias y los avales, no les eximen de sus compromisos de pagos futuros. Además, insiste el organismo, “la incertidumbre sobre el futuro (que podría provenir de la percepción del riesgo de aparición de nuevos brotes de la enfermedad) lleva a los agentes a posponer decisiones de gasto”.

En el caso de la vivienda, la previsión del organismo supervisor apunta a un desplome de la inversión de entre el 6,9% y el 10,1% en el escenario más probable (ocho semanas de confinamiento), mientras que el más pesimista eleva dicha caída hasta el 13%. No obstante, el año que viene podría repuntar entre un 3,8% y un 6,3%. En lo que se refiere a la inversión en bienes de equipo, la caída será de entre el 33% y 57% en este ejercicio, mientras que la recuperación del año que viene estará entre el 4,9% y el 42%

Los efectos y consecuencias de la situación suponen pérdidas económicas de gran envergadura que no se recuperan, y que se llevan con ellas empresas y empleo que va a costar mucho tiempo restablecer, afectando al presupuesto nacional que debe ajustarse en sus preferencias a impulsar esa recuperación que nos devuelva eventualmente a los niveles riqueza-país que se habían alcanzado antes de la incursión de esta pandemia.

El juego y muy especialmente el juego presencial en locales físicos, se encuentra afectado gravemente por esta situación, al igual que otras actividades de ocio y entretenimiento como bares, restaurantes, espectáculos como cine, teatro y otras artes culturales, conciertos, eventos deportivos y demás negocios que requieren un establecimiento abierto al público, y conviene evaluar los efectos dependiendo de la duración a intensidad de esta situación creada por el Estado de Alarma decretado el 15 de Marzo pasado.

Su duración en el tiempo y la forma en que se establezca la recuperación de la actividad tiene un impacto directo sobre la dimensión de los daños económicos y sociales a los negocios y las personas que dependen de ellos, y como no a la propia economía de las administraciones al paralizar sus ingresos fiscales que emanan de esta actividad.

Todos estos negocios no solamente han de contabilizar las pérdidas que está suponiendo el cierre hasta que se lleve a cabo su apertura, si no cual va a ser el proceso de normalización y en ese caso como va a poder recuperar la normalidad de su actividad, por lo que estas pérdidas se alargaran en el tiempo en virtud de cuál sea el escenario y condiciones en el que se llevará a cabo su apertura al público.

Analisis del Impacto sobre la Industria del Juego Privado Presencial

Dependiendo de la duración de esta situación de confinamiento y paralización de las actividades que establece el Estado de Alarma, se produce un impacto sobre los ingresos de la industria del juego privado presencial que evoluciona en su gravedad a medida que se retrasa la reapertura de los establecimientos de juego; casinos, salas de bingo, salones de juego, casas de apuestas o establecimientos de hostelería donde están instalas las máquinas de juego de tipo B. Ya queda reflejada en los gráficos anteriores la dimensión del impacto según sea la fecha en la que comiencen a recuperar su actividad los establecimientos de juego privado que tendrá un proceso lento y complicado.

La situación a la fecha de redactar este informe es que no se prevé el comienzo de la relajación de las medidas de confinamiento hasta mediados de Mayo, con unas previsiones poco halagüeñas para el sector del juego, según manifestaciones de miembros del gobierno, que muestran un escenario de reactivación de la actividad económica escalonada dando prioridad a pequeño comercio y ciertas actividades comerciales, y en el que los locales de acceso público como hostelería, restauración, cines, teatros y dentro de ese capítulo los establecimientos de juego presencial no serán de los primeros, seguramente con una segmentación de tipo de negocio, dimensión y posibilidad de control de la cercanía de los clientes, por lo que la mayoría de los establecimientos de juego más bien se tiene previsto dejar su apertura para el cuarto trimestre del 2020, y con medidas restrictivas de acceso y aforo que permite estimar una recuperación parcial de la actividad.

Habría que añadir que la sociedad tendrá unos hábitos y comportamiento distintos a los que se tenían antes del Covid19, y que va a tardar mucho mas tiempo que la propia paralización de la actividad, la recuperación de la “normalidad” que conocimos hasta el 15 de marzo de 2020.

Por esto, se analizan y tienen en cuenta varios escenarios y cuál es la repercusión económica y social sobre la industria del juego privado presencial, habiendo que reivindicar que no se discrimine la actividad respecto de otras de ocio y entretenimiento.

Lo que se conoce de la evolución de la pandemia permite asumir que no habrá una recuperación total de la actividad, hábitos y costumbres que existían antes de la llegada del Covid19 hasta que no se disponga de una vacuna que garantice la salud, y esto es algo que no se puede visualizar, solamente seguir las informaciones que nos dicen que esto no va a suceder hasta pasados 12 a 18 meses, lo que nos lleva a contemplar un escenario de inestabilidad.

Esto significa que estamos hablando de un horizonte que nos lleva a finales del 2021 para recuperar un nivel de normalidad que nos permita alcanzar niveles de actividad económica que nos acerque a los que había antes de marzo de 2020, pero todas las dificultades que se han puesto en el camino han de ser sorteadas y la mayoría de ellas no dependen de los empresarios, siendo cambiantes como estamos viendo cómo se

producen las decisiones y repercusiones cada semana en las últimas cinco que han pasado y las que nos quedan.

Es por ello por lo que establecer un calendario de recuperación de la actividad es un riesgo que puede modificar cualquier proyección de manera inesperada, y con esa consideración han de tomarse cualquier estimación que se hace.

Esta evolución de la actividad estaría basada en una apertura de los establecimientos de juego privado presencial a partir del tercer trimestre de 2020, contemplando que la recuperación de esa actividad y de la demanda no va acompasada con la recuperación de los ingresos brutos de juego, que estarían un trimestre por detrás de la apertura.

La naturaleza del impacto nos lleva a hacer una estimación de la recuperación de la actividad de los establecimientos presenciales que se extenderá en el tiempo, mas allá de la fecha en la que se puedan abrir las puertas para el acceso del público, teniendo en cuenta los diversos factores que se pueden contemplar por experiencias de otros países que han puesto en marcha medidas de liberalización de movimientos y las pautas que se están manejando por las autoridades responsables en España, estimando que la liberalización de los locales de juego no sean autorizados para reanudar la actividad hasta el tercer trimestre de 2020:

Factores macroeconómicos que condicionan la recuperación de la actividad:

Igualmente se tratan de identificar factores directos relacionados con la actividad que  incluyen directamente en alcanzar cierta normalidad, pero hay más que contemplar y que afecta a cada región, segmento y empresa de una forma específica.

A estos factores se ha de añadir la previsión de una recuperación de la economía en U, por lo que se estima un periodo indeterminado en el que la economía caminará hasta que comience la recuperación de parámetros positivos favorables al crecimiento, y que están relacionados con las decisiones que tomen instituciones económicas como el Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional y la Unión Europea, respecto del tipo de ayuda e incentivos que se facilitarán a los distintos países afectados con mayor gravedad por la pandemia y como estos – en nuestro caso España – aplican estos fondos y ayudas a la industria, teniendo en cuenta que ya se está excluyendo a la industria del juego de medidas económicas de apoyo en las primeras medidas que se están llevando a cabo, lo que deja a la industria a que resuelva con sus propios medios la situación en un escenario, como puede verse mas adelante, que muestra las perspectivas más negativas.

En estos escenarios están descontados los efectos de la paralización de la actividad económica sobre la economía de la población, capacidad adquisitiva de per personas que mantengan el empleo y el empobrecimiento de la demanda por el incremento exponencial del desempleo que se estima puede llegar al 21% de la población – más de 5.5 millones de parados – aparte de aquellos afectados por los cientos de miles de ERTES cuya duración es variable dependiendo de la actividad y muchos de los cuales terminarán en despidos e incorporación al desempleo.

La pérdida de ingresos se estima en unos €350 millones de euros mensuales en conjunto, y no se puede prever que cuando se reanude la actividad se vuelva al mismo nivel de ingresos que había hasta febrero 2020, por lo que la recuperación de los ingresos será lenta y como se analiza en otro gráfico, no es previsible que se vuelva a los niveles de ingresos pre-Covid19 hasta bien entrado el 2021.

Esta situación afecta gravemente a la industria del juego privado presencial, dejará también en el camino a muchas empresas y con ellos a miles de personas sin empleo.

La pérdida de empleo se ajusta a la recuperación escalonada de la actividad, contemplando ajustes de costes y empleo de las empresas para afrontar el periodo de recuperación de la demanda, por lo que el empleo lleva asimismo al menos un trimestre de retraso para sobre la recuperación económica de los negocios. En cualquier caso, se estima que no se recuperarán los niveles de empleo pre-Covid19 hasta finales del 2021.

Los gráficos reflejan el gravísimo impacto que la situación tiene sobre el empleo directo de la industria del juego privado presencial, a lo que habría que añadir los empleos indirectos de sectores relacionado con los servicios y que giran sobre la actividad de la industria del juego privado en España.

No se analizan los efectos sobre el empleo de los establecimientos de hostelería, que van a ser importantes, e incidirán directamente sobre la actividad de explotación de las máquinas de juego de tipo B, ya que se prevén cierres de bares y otros establecimientos de hostelería donde estás máquinas se encuentran instaladas.

La hostelería en España ocupa a mas de 270.000 establecimientos, aportando 1,3 millones de empleos directos, con un valor de negocio por encima de los €94 millones de Euros.

Su repercusión en industrias, proveedores y servicios indirectos es exponencialmente mayor, por lo que el impacto en este segmento, además de las máquinas de juego de tipo B será muy importante.

El escenario social que nos espera

Es un escenario diferente, con una lenta recuperación de la actividad social, aperturas escalonadas de establecimientos que no por ello van a recuperar su normalidad, por lo que cualquier estimación ha de tener en cuenta que una cosa es abrir la puerta y otra que vuelvan a entrar los clientes y gastar como lo hacían en el mes de febrero – tan reciente y diferente a lo que nos espera – con una España casi cerrada al exterior, al menos en lo que queda de 2020, con el grave impacto sobre una de las industrias más importantes del país como es el turismo (e+€90 mil millones de Euros de pérdidas), que se va a quedar relegado al nacional que tendrá que someterse a unas condiciones y restricciones que no van a permitir unos desplazamientos o vacaciones normales.

Pero, además, el trabajo en remoto obligado por las circunstancias se va a convertir en algo habitual para todos los que puedan llevarlo a cabo sin menoscabo de la eficacia, y ello trae a colación la reducción de los desplazamientos por motivos profesionales cuando se puedan llevar a cabo en remoto, algo que se ha podido comprobar que funciona para numerosas reuniones y seguimiento de distintas actividades, y va a cambiar muchos hábitos y comportamientos de la sociedad.

Los hábitos y costumbres de la sociedad a partir de esta situación van a condicionar la demanda y con ello el funcionamiento de los negocios, que habrán de adaptarse a estos nuevos comportamientos de la sociedad.

Si la intención del gobierno persiste en que para el verano se comenzará la recuperación del sistema productivo y dejar para final del año la actividad de ocio y entretenimiento, se dibuja un escenario catastrófico en el año 2020 para la industria del juego privado en España.

Incluso si esta reactivación se produjera en el cuarto trimestre, conseguir una cierta normalidad será lenta y condicionada por todos los factores antes analizados, y incógnitas por resolver para que las empresas puedan preparar un plan para la puesta en marcha de su actividad.

Se ha de tener en cuenta que no habrá una apertura homogénea para todo el país, por los diferentes niveles del impacto de la pandemia por comunidades autónomas, y porque cada CCAA es competente para poner en marcha su desconfinamiento en coordinación con las medidas que finalmente dicte el gobierno dentro de las atribuciones que le otorga el Estado de Alarma.

La industria del juego privado en España necesita ser escuchada por la administración de nacional y las administraciones de las comunidades autónomas, con el objeto de que pueda exponer las graves consecuencias que sobre sus negocios está teniendo la pandemia, y ver de que manera se puede planificar su reactivación en las mismas condiciones que otras actividades de ocio y entretenimiento, recibiendo los apoyos y ayudas económicas y fiscales para una actividad que aporta riqueza, empleo, ingresos fiscales, innovación tecnológica y es un servicio para la sociedad.

Estoy seguro de que las instituciones representativas de la industria y los trabajadores tienen preparado un plan de reactivación de la actividad para proponerlo a las autoridades competentes y negociar una puesta en marcha segura y viable para cada segmento del sector. Esto es importante porque los que mejor conocen sus locales son los empresarios que los gestionan y saben como ofrecer soluciones compatibles con la seguridad y salud de los clientes y los trabajadores.

Pero todo hoy día se convierte en experimental por lo que supone una situación nueva y excepcional, y a veces crean falsas expectativas de solución, que ha de venir y proponerse con el debido asesoramiento de personas con capacidad de determinar cuáles deben ser las condiciones más seguras para el público y trabajadores de los locales de acceso público como son los de juego presencial.

Deben acabarse las fobias contra la industria, dejando claro lo que se aporta y que no hay otra alternativa que la transferencia de la demanda a la ilegalidad falta de control y garantías para los consumidores como está demostrado repetidamente cuando se limita la oferta acompasada con la demanda.

Es hora de afrontar la realidad con determinación y teniendo en cuenta todas las circunstancias que concurren para poder encontrar y ofrecer soluciones que permitan recuperar la actividad de la industria cuanto antes y como mejor sea posible.

Eduardo Morales Hermo 

20 marzo 2020

Fuentes:

https://www2.deloitte.com/es/es/pages/about-deloitte/articles/impacto-economico-del-covid19.html

McKinsey & Company M&S COVID-19 Consumer Pulse Survey, 28/3-29/03/2020 N = 1,003 Sampled and weighted to match Spain’s

Boston Consulting Group – Epidemic Projections Summary V Final

Monitor Deloitte Impacto y Escenarios de recuperación en Consumo y Distribución

Banco de España – ESCENARIOS MACROECONÓMICOS DE REFERENCIA PARA LA ECONOMÍA ESPAÑOLA TRAS EL COVID-19

https://www.bain.com/esinsights/anticipating-when-consumer-sentiment-on-covid-19-will-turn/

http://www.anged.es/2020/04/espana-medidas-fiscales-empresas/

http://www.funcas.es/covid-19/