Normal y Anormal…
AZARplus
Pertenezco a una generación que, durante la Transición, luchó abiertamente por la conquista de las libertades civiles que no pudimos disfrutar en la larga noche de la Dictadura… El derecho a la huelga, a la libertad de expresión, al sindicalismo horizontal… o a unos Juegos de Azar, distintos a los que explotaba en exclusiva el Estado… Y no fue nada fácil, porque la Policía de Franco podía detenerte o sacarte a hostias de un Bingo ilegal o de una partida clandestina de Bacarrá, pongo por ejemplo…
Y si digo esto es porque las Asociaciones más prominentes de nuestro Sector parecen haber olvidado el origen de una libertad civil y, por tanto, de un derecho que se conquistó en la calle… En el Juego, incluso antes de la Constitución, se hizo “normal en la Ley lo que era normal en la calle”... Pero con el paso de los años y gracias a los paños calientes con los que envolvimos y envolvemos a la Ludopatía, en las Normativas sobre el Juego predominan las anormalidades existentes en las calles… Quiero decir que, en nuestra actividad, lo normal es la diversión y lo anormal la patología…
Y no estaría de más que, por una vez, hiciéramos caso al Ministro de Consumo, quien acaba de asegurar que “Ningún modelo de negocio puede sustentarse sobre la vulneración de derechos”… A nadie se le oculta que estamos trabajando en un escenario en el que se vulneran nuestros derechos, a través de de la infame asimetría jurídica que soportamos con respecto a Selae y la Once…
Va siendo hora de que cambie la situación… Sin complejos, sin intereses particulares y con la reciente PNL sobre nuestras cabezas, se debe reaccionar contundentemente a la perseverancia pública de esa asimetría, que tanto daño nos está haciendo y nos hará si continua blindada en el tiempo… Porque, esta vez, tiene razón el señor Bustinduy: “Ningún modelo de negocio puede sustentarse sobre la vulneración de derechos”… O sea, como ejemplo, el nuestro…
Bien visto Ortega.Lo que anuncia el ministro seguramente traerá locos a las empresa online y estaría bien que las presenciales lo aprovecháramos para terminar con la injusta asimetría de la que hablas.Felicitaciones y un saludo.