El lujoso hotel es propiedad de MYR, la firma de Fidel Molina y Ramón Rojo
La prestigiosa revista Forbes se hace eco del Hotel Palacio Vallier
“Enclavado en el corazón del casco antiguo de Valencia en una ubicación única que combina historia y belleza arquitectónica se encuentra el Hotel Palacio Vallier un destino único que encarna el lujo la sofisticación y el encanto del pasado”. Así comienza el reportaje que ha dedicado Forbes al hotel perteneciente a MYR, la sociedad de Fidel Molina y Ramón Rojo.
Tal y como se hace eso la prestigiosa revista, el buque insignia de la compañía MYR Hotels es un palacete del siglo XIX situado en la imponente Plaza Manises, donde se encuentran otros edificios ilustres como el Palacio de la Generalitat Valenciana y la Diputación de Valencia, junto a la estatua de Francisco Pizarro y un majestuoso ciprés de más de diez metros.
El palacio ha conservado elementos del siglo XIX, pero también presenta una estética contemporánea que incorpora elementos del art decó valenciano y la nueva cerámica de Lladró. Destaca el Lladró Lounge Bar, un bar-museo, y la exclusiva suite Lladró, que ocupa el espacio que anteriormente era el salón de baile del palacio. Cabe mencionar que figuras del cine como Cate Blanchett, Penélope Cruz y Javier Bardem han disfrutado de su estancia en este lugar.
Además, el suelo del palacio tiene una historia fascinante, ya que durante su restauración se descubrieron los restos de una perfumería romana del siglo III, un hallazgo excepcional que ha dado lugar al restaurante La Perfumería, que rinde homenaje a sus orígenes. En este restaurante, chefs con estrellas Michelin de diferentes partes del mundo se unen para fusionar sus creaciones culinarias con el sabor y la pureza de los productos autóctonos. La bodega del restaurante alberga una impresionante selección de vinos que complementan perfectamente las exquisitas propuestas culinarias.
En cuanto al alojamiento, el hotel dispone de 31 habitaciones y suites diseñadas para brindar una experiencia acogedora y hogareña mediante el uso de la luz y materiales nobles. Sin embargo, el punto destacado es su magnífica terraza en la parte alta del edificio, desde donde se pueden contemplar vistas únicas de la Catedral y la Plaza de La Virgen.
VER FORBES.- Palacio Vallier, una experiencia de estrella con historia
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