Interesante y oportuno artículo de opinión del prestigioso experto, en el que explica la importancia de informar a los medios de comunicación para evitar enfoques negativos
Gómez Yáñez: “Si el juego no se ocupa de su imagen, alguien se ocupará”
Los conocimientos, pensamientos y opiniones de José Antonio Gómez Yáñez sobre el Sector son siempre interesantes, especialmente en cuestiones sensibles y cruciales para la Industria. En el siguiente artículo que firma a continuación, el Profesor de Sociología en la Universidad Carlos III explica la importancia de cuidar la imagen pública de las empresas, con el fin de ofrecer información a los medios de comunicación sobre su buen hacer y proceder. Asimismo, sostiene que “si el juego no se ocupa de su imagen, alguien se ocupará”, por lo que se trata de un deber insoslayable para gestionar el futuro del Sector de la mejor manera, evitando enfoques negativos. ¡Recomendamos su atenta lectura!…
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VER AZARplus 25/04/17.- “Las Administraciones se han quedado por detrás de la Sociedad en lo que se refiere al Juego”
SI EL JUEGO NO SE OCUPA DE SU IMAGEN, OTROS LO HARÁN (O LO HACEN)
El juego va a estar cada vez más presente en la opinión pública, o sea, en los medios de comunicación, porque es una alternativa de ocio que atrae a muchas personas y se está trabajando bien para atraer a más clientes. Gestionar esa presencia es clave para el futuro del sector.
Se puede estar de acuerdo en que el juego es maltratado en los medios de comunicación generalistas. Los artículos que publican repiten estereotipos confundiendo el presencial y el online y se sazonan con la salsa picante del juego problemático. Este enfoque se debe al desconocimiento del juego como sector del ocio entre los periodistas y a que toman para su trabajo el discurso antijuego presente en la sociedad, influyente por la efervescencia de las minorías que lo emiten. No es algo específicamente español, la pulsión antijuego está presente en todo Occidente.
Una parte del problema para el sector estriba en que los partidos y autoridades administrativas definen sus prioridades en función de lo que ven en los medios. En estos días, por ejemplo, la prensa local se hace eco de la oposición vecinal a la instalación de salones en Cartagena, Burgos y Fuenlabrada. Desde hace unas semanas gotean artículos sobre la cantidad de salones en Madrid. En algunas jornadas un responsable administrativo se hacía eco de estos artículos.
Alguna anécdota personal. Hace unas semanas me llamó un periodista que me localizó a través del barómetro de los salones. Sus preguntas se dirigieron rápidamente hacia la cantidad de salones en Madrid y sus consecuencias sobre, bueno, ya lo imaginan. Le hice ver que podía hacer un artículo más interesante. El resultado se publicó la semana pasada El Mundo-La Actualidad Económica, que amablemente reseñó AZARplus hace unos días (y que da pie a este artículo). Creo que el contenido es informativo, el problema que se endosa al juego quedó relegado al penúltimo párrafo de dos páginas.
Las navidades pasadas una cadena de radio me llamó para hablar sobre la Lotería de Navidad. De repente, el periodista pasó a preguntar sobre el juego y los temas que ya suponen. Cuando respondí que España es uno de los países con menos tasa de juego problemático, noté su decepción, en un par de frases acabó la conversación. El corte fue tan repentino que continué con móvil en la mano y escuché a alguien: “pues nos ha chafado la tertulia”.
De estos episodios, y otros, se puede deducir que si se ofrece información a los periodistas y medios es posible crear contenidos objetivos y frenar enfoques negativos.
El juego va a estar más presente en la opinión pública. Se está convirtiendo en una alternativa de ocio creciente a través de los salones y las apuestas. La recuperación está atrayendo a nuevos públicos a casinos y bingos e incrementa las monedas que se echan en las máquinas instaladas en los bares. El juego online es una opción de ocio doméstico. Inevitablemente, esto atraerá la atención de los medios de comunicación generalistas, prensa y digitales. Las administraciones y los partidos formularán sus programas y demandas al sector dependiendo de cómo se refleje el juego en los medios.
Las empresas del juego deberán canalizar esta demanda de información. El problema es sencillo: el juego va a tener una imagen social, o la tratan de gestionar sus empresas o la definirán sus adversarios, muy activos para captar la atención de los medios y Administraciones.
El sector del juego debe convertirse en proveedor de información sobre sí mismo. Ofrecer a los medios de comunicación, agencias de noticias, periodistas interesados en el juego y administraciones información propia, objetiva y ordenada sobre el juego y sus clientes. Se trata de generar un entorno informativo menos hostil, receptivo a sus mensajes.
Discreta y persistentemente, con paciencia, el sector puede informar a la opinión pública contrapesando a los sectores hostiles, presentándose como una vertiente del ocio, algo clave en un país que tiene el turismo como principal fuente de ingresos; que crea empleo –estaría bien que se deslizara la idea de que es empleo local-, con empresas que cumplen elevados estándares de atención al cliente y respeto por las normas del juego responsable.
Si el juego no se ocupa de su imagen, alguien se ocupará.
José Antonio Gómez Yáñez
Profesor de Sociología en la Universidad Carlos III
Estoy completamente de acuerdo con el Profesor Gómez Yáñez en que hay que conseguir una presencia positiva del Sector en la Prensa. Pero es difícil porque el Sector no genera de forma constante noticias positivas, como no las genera por ejemplo el Sector de la Panadería que, al igual que nosotros, hace su labor o su función social cada día. Hacer las cosas bien cotidianamente no es noticia. ¿Qué comunicarle a los medios para tener esa presencia positiva? Repito que lo veo muy difícil, quizá con la excepción de los Campeonatos de Poker que sí podrían enfocarse como espectáculo y deporte con interés masivo, con sus protagonistas de fama. Pero eso es algo que ni siquiera se ha conseguido a buen nivel en España con las carreras de caballos pese a ser un clarísimo elemento de ocio abierto a todos los públicos.