Estados Unidos, más cerca de legalizar las Apuestas Deportivas tras un fallo histórico del Tribunal Supremo que permite la participación de más Estados

Votada en 1992, la Ley de Protección Deportiva Profesional y Amateur (PASPA) (conocida como “Ley Bradley”) prohibió las Apuestas sobre deportes profesionales o académicos, salvo en los cuatro Estados donde ya existían. En concreto, las prohibió en todos los Estados, excepto en Nevada, y, con restricciones, en Delaware, Montana y Oregón.

El Congreso adoptó esta legislación con la intención de preservar la integridad de los eventos deportivos. Una restricción, por otro lado, respaldada por las principales federaciones deportivas: la NBA (baloncesto), la LNH (hockey), la NFL (fútbol americano) y la LNB (béisbol). “Las apuestas deportivas bajo los auspicios de los estados transmitirían el mensaje de que en el deporte, el dinero es más importante que superarse a uno mismo y ser deportista”, dijo el senador demócrata Bill Bradley, una ex estrella del baloncesto.

Argumentando que la ley violó la Décima Enmienda (prohíbe las leyes federales que obligan a los estados a cumplir los dictados federales), ya que los obligó a prohibir las Apuestas deportivas. La revocación de la Ley de 1992 se ha traducirá en la posibilidad de que cada Estado decida. Habida cuenta de que los jueces dijeron que la legalización del Juego deportivo era una elección política importante, “la elección no nos corresponde a nosotros”, dijo el juez Samuel Alito, según recoge el periódico Governing. “El Congreso puede regular los juegos de azar deportivos directamente, pero si elige no hacerlo, cada estado es libre de actuar por sí mismo”, concluyó.

Un entorno cada vez más favorable

Un marco legislativo que no solo establecía desigualdades entre Estados, sino que además daba la espalda a las constantes peticiones de legalización, incluyendo a las mismas federaciones deportivas, cada vez más pragmáticas.

Si bien los cuatro principales circuitos deportivos de Estados Unidos (hockey, baloncesto, fútbol americano y béisbol) oficialmente están en contra de su extensión, son conscientes de que se trata de una nueva fuente de ingresos millonaria que les resulta muy atractiva.

Al igual que ellas, conscientes del negocio que estaban dejando pasar de largo, desde otras instancias se fue creando un clima más favorable. Igualmente, Donald Trump también hizo campaña contra la ley, buscando un salvavidas para sus establecimientos de Juego en Atlantic City. La administración Trump, sin embargo, se ha mostrado en contra, según ApNews.

Todo ello propició que hubiese un cierto optimismo y, sobre todo, grandes expectativas ante el fallo, que ahora dinamina este marco legislativo. Sin obviar los grupos que se mostraban contrarios a su extensión, entre ellos las comunidades religiosas.

Gran victoria de Nueva Jersey

El Tribunal Supremo ha dado la razón al estado de Nueva Jersey, que está luchando desde 2010 para obtener el derecho a organizar Apuestas deportivas. En el caso Christie v. NCAA, el Tribunal Supremo votó a favor de que Nueva Jersey pueda legalizarlas en su territorio, dando vía libre para el resto de Estados que, hasta ahora, lo tenían prohibido.

Para remontarse al inicio de la polémica sobre las Apuestas deportivas, coincidiendo con la aprobación de una medida que legalizó las Apuestas en Casinos e Hipódromos en Nueva Jersey, bajo el gobierno de Chris Christie (republicano) quien, desde entonces ha mantenido un difícil pulso contra el texto.

Llevando el caso ante el Supremo, el actual gobernador de Nueva York, entonces de Nueva Jersey, finaliza su larga serie de sistemáticos fracasos en los tribunales con un éxito histórico: la anulación de esa ley federal de 1992, lo que permitirá a los Estados sacar partido de tan prometedora disciplina de Juego.

¿Es el final de las Apuestas ilegales?

“Nuestras leyes de apuestas deportivas están tan fuera de lugar que convertimos a decenas de millones de estadounidenses en delincuentes por la simple razón de que les encanta el baloncesto universitario”, dijo el CEO de la Asociación Estadounidense de Juegos de Azar, Geoff Freeman, con motivo del último torneo universitario de baloncesto. Según la American Gaming Association (AGA), solo el 3 por ciento de estas Apuestas, que suman un total de 10 mil millones de dólares, se habrían hecho legalmente en Nevada.

Por un lado, su prohibición, lógicamente, no significa su inexistencia. Muy al contrario, se trata de un mercado negro que alcanza cifras millonarias. Según estimaciones de la AGA, las Apuestas deportivas ilegales cada año más de 150 mil millones de dólares. Por lo tanto, con el respaldo de la Corte Suprema al intento de Nueva Jersey de legalización, se ha avanzado de forma importante para combatir el mercado negro.

Se abre la vía para su legalización

La decisión de la Corte Suprema únicamente afecta a este caso, pero se prevé que pueda abrir la puerta a otros Estados. Nada más conocerse el fallo, Christie manifestó que éste supone un aval para la autonomía de los Estados frente al Gobierno federal. “Un gran día para los derechos de los estados y para que la gente pueda hacer sus propias decisiones. Los ciudadanos de Nueva Jersey querían que sus apuestas deportivas fueran legalizadas y el Gobierno federal no tenía derecho a decirles que no”, concluyó.

Con respecto a la legislación de Nueva Jersey, su actual gobernador, Phil Murphy, dijo estar “emocionado” por el fallo y anunció que trabajaría con los legisladores estatales para promulgar una ley que autorice las Apuestas deportivas “en un futuro muy cercano”.

Casinos e Hipódromos, por lo tanto, pronto podrán ofrecer Apuestas deportivas. Tanto para los inversores en el Sector como en hoteles y restaurantes afiliados, la decisión de la Corte Suprema abre grandes perspectivas de negocio. Además de favorecer a estos establecimientos, la autorización del fallo es una gran noticia para los apostadores, sobre todo para los más talentosos, que verán multiplicarse las oportunidades de hacerlo.

Más reacciones 

“Decenas de organizaciones gubernamentales estatales y locales apoyaron el cambio de la prohibición”, informa Governing. En un comunicado, la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales calificó el caso como un “fallo histórico” que “brinda a los estados otra herramienta con la que pueden seguir elaborando políticas inteligentes y personalizadas durante un momento de paralización del Congreso en Washington”.

“La decisión de la Corte Suprema de hoy sienta las bases para un entorno completamente diferente, en el que nunca hemos operado hasta ahora”, dijo la Federación Nacional de Hockey sobre Hielo en un comunicado. Igualmente, se han sucedido los comunicados de la NBA, la Federación béisbol y de fútbol americano, en cierto modo preocupados por que sus ámbitos puedan verse perjudicados de empezar a creerse que el resultado de los encuentros pudiera verse influido por las Apuestas, informa AP News. 

Al margen de las empresas que han emitido su propio comunicado, la AGA, por su parte, ha manifestado que considera que la decisión es “una victoria para los millones de estadounidenses que buscan apostar en los deportes de una manera segura y regulada. De acuerdo con una encuesta del Washington Post, un sólido 55 por ciento de los estadounidenses cree que es hora de poner fin a la prohibición federal de las apuestas deportivas. La decisión de hoy hace posible que los estados y las naciones tribales soberanas le den a los estadounidenses lo que quieren: un mercado abierto, transparente y responsable para las apuestas deportivas. Mediante una regulación inteligente y eficiente, este nuevo mercado protegerá a los consumidores, preservará la integridad de los juegos que amamos, capacitará a las fuerzas del orden público para luchar contra los juegos ilegales y generará nuevos ingresos para los estados, organismos deportivos, emisoras y muchos otros. La AGA está lista para trabajar con todas las partes interesadas (estados, tribus, ligas deportivas y organismos encargados de hacer cumplir la ley) para crear un nuevo entorno regulatorio que aproveche esta oportunidad para atraer a los aficionados y estimular las economías locales”.

Todavía un largo camino lleno de incógnitas

El dictamen de la Corte Suprema de los Estados Unidos ha provocado un seísmo mediático, como era de esperar. A las primeras informaciones, más pegadas a la noticia, se están sucediendo muchas otras que recogen las reacciones y consecuencias de la misma. Entre otras, la subida de las acciones de los Casinos, pues la decisión despeja el camino para que las Apuestas deportivas sean legales.

Y no solo en Nueva Jersey, puesto que ahora todos los Estados podrán elegir si adoptarlas o no. Aun así, todavía existe la posibilidad de que el Estado lleve a cabo una regulación, en cuyo caso no sería competencia de cada uno de los mismos. Igualmente, deben despejarse un sinfín de variables para llegar a ser una realidad en todo el país. 

Las Vegas: ¿el gran perdedor?

El principal beneficiario de PASPA ha sido Las Vegas, donde las Apuestas son legales desde 1949, ya que creó “una excepción para que continúe dominando esta industria y creciendo”, reza un reportaje de Sports Ilustrated.

El impacto real de la nueva situación en Las Vegas todavía es una incógnita, pero también es cierto que “esos días han terminado. Las Vegas ahora enfrentará una competencia” importante pero, siempre según el mencionado texto, “el fallo del Tribunal Supremo no será señal de la desaparición de Las Vegas. Pero podría significar más competencia por los mismos dólares”.

Todo un mundo por descubrir

Aunque las Apuestas ilegales son una realidad en Estados Unidos, su legalización, para la mayor parte de los estadounidenses dibujará un nuevo escenario. Sin duda, supondrá descubrir otra cara del Juego, más allá de los sectores legalizados actualmente, en los que el país es una indiscutible potencial mundial.

Asimismo, los Estados mejorarían sus presupuestos gracias al beneficio fiscal que supondría legalizar las Apuestas deportivas mediante una nueva inyección ecónomica en forma de impuestos. A nivel laboral, citando un estudio de Oxford Economics, la misma AGA afirma que se podrían crear 150.000 empleos.

A pesar de las numerosas ventajas, a día de hoy, la regulación de los estados está en el aire. Por lo pronto, las previsiones son que al menos 18 estados podrían legalizar las Apuestas deportivas de forma más temprana. Un número que no es casual, pero sí podría ser mayor, lógicamente. Recordemos que, en el litigio, 18 estados y los gobernadores de otros tres estados mostraron su apoyo a Nueva Jersey mediante la figura legal del “amicus curiae”. Al margen de ello, no obstante las precauciones apuntadas, lo cierto es que decenas de Estados en todo el país podrían comenzar pronto a ofrecer Apuestas deportivas a raíz de la trascendente decisión del Alto Tribunal.