Polonia procesará a los jugadores de webs ilegales

AZARplus / eldiariodeljuego.- Los jugadores polacos que participen en juegos de azar online con operadores sin licencia seran procesados por la Justicia. La advertencia a estos apostadores marca por primera vez, la dura acción que emprende el gobierno contra estos participantes del mercado online no regulado.
Polonia tiene una relación difícil y complicada con los juegos de azar online. En 2009, cuando el estado preparó la legislación para revisar sus leyes de juego, se desató el llamado “escándalo Blackjack”, implicando a varios políticos de alto nivel, que trataron de influir en las bases del proyecto de ley a favor de la industria, de la cual supuestamente recibieron sobornos.

El primer ministro Tusk, se vio obligado a despedir a varios ministros y aliados políticos, entre ellos el ministro de Deportes, Miroslaw Drzewiecki, y la consecuente ley de juego castigó a la industria, con la imposición de amplias restricciones a los casinos, y una prohibición general de los juegos de azar online. 

Con la nueva ley todos los servidores deben estar basados en territorio de Polonia y los sitios llevan las terminaciones de dominio .pl. Además, todas las operaciones tendran que correr exclusivamente a través de los bancos polacos y la tasa impositiva se fijó en un 12 por ciento, lo que, en su momento, fue la más alta de cualquier jurisdicción de juego en Europa.

Como consecuencia de estas medidas solo 4 operadores se interesaron en el mercado polaco de juego online.

En junio de este año, el Ministerio de Hacienda elaboró una enmienda a la ley de juegos que, de aplicarse, eliminaría la obligación a los operadores de incorporar una filial en Polonia; en cambio, simplemente se le pide que mantengan una sucursal local a efectos fiscales, una medida que esencialmente abrirá las fronteras a cualquier operador dentro de la Union Europea.

Se estima que los cuatro operadores en línea de Polonia, atienden a sólo el 9% del mercado del país, que se pondera que mueve unos U$s 1.500 millones al año, mientras que el gobierno está perdiendo unos 178 millones de dólares por año, en ingresos impositivos potenciales del mercado offshore.